Kim Jungkook es un Omega dulce, cariñoso, atento y muy hermoso.. el es el hijo mayor del rey Kim Namjoon. El está destinado a ocupar el trono pero eso no lo hace feliz. El quiere ser libre, olvidar todas la reglas, que lo traten como una persona nor...
—me tengo que ir -lo mire a los ojos- nos vemos mañana profesor
El río, negando con la cabeza
—nos vemos mañana alteza
El hizo una reverencia, mientras yo reía.. después de todo me saco una sonrisa
Me puse de puntillas y le di un beso en la mejilla después salí corriendo de ahí. Escuché como el reía nerviosamente.. yo sentía mi cara arder..
—alteza por que está corriendo
Mire a seung que estaba parado enfrente de mi y solo sonrei al recordar lo que acababa de hacer.
—oh nada seung -sonrei- vamos los hijos de la duquesa no an de tardar en llegar
—si tiene razón alteza -ambos empezamos a caminar- alteza
—dime seung..
—su hermano lo espera en la puerta principal del palacio..
—oh claro vamos entonces
Ambos empezamos a caminar hacia la puerta principal..
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—hermano tú ya as conocido a los hijos de la duquesa antes -lo mire y negué con mi cabeza- entonces es primera vez que los conoces, y por que papá no está aquí.
—tae -el me miro- por favor deja de hacer tantas preguntas que me estresas más de lo que ya estoy
—lo ciento -el bajo la cabeza- es que estoy nervioso y cuando lo estoy solo pregunto muchas cosas
Suspire hondo y tome su mano el me miro tímido
—ya lo ciento por haberte hablado así pero no e tenido un buen día hoy -el asintió- bueno y respondiendo a tus preguntas -el soltó mi mano- si es mi primera vez conociéndolos y papá no está aquí por que tiene una reunión muy importante con el congreso pero estará con nosotros dentro de poco espero..
Susurre lo último para mi mismo
—oh bueno sabes no soy bueno conociendo personas nuevas
—bueno eso lo se perfectamente hermanito
Ambos reímos, en eso sonaron las trompetas anunciando que los hijos de la duquesa habían llegado. El carruaje paro enfrente de las gradas del palacio, nosotros bajamos unos escalones más para recibirlos mientras ellos bajaban del carruaje.
Vi cómo tae no quitaba la mirada del que me pareció era un omega. Tuve que carraspear para que el dejara de verlo tan profundamente. Cuando estuvimos al frente, ellos hicieron una reverencia hacia nosotros.
—sus majestades es un placer estar aquí en representación de nuestra madre.
—el placer es nuestro de tenerlos aquí -ellos se enderezaron y nos miraron- por favor síganme
