Virus Mann's

Capítulo 1: "Caminantes" Parte 2

Al contarles el plan decido de que alguien deberá llamar la atención de los caminantes para así que esté libre el pasillo y entrar para conseguir lo mas rápido posible las armas y largarnos de aquí antes de que anochezca.

- yo me ofrezco estoy en forma todavía para correr, no ha pasado ni un mes de los caminantes no creo que me de tanto miedo acercarme a ellos. Dice Dariel.

- será un plan difícil, pero apenas tengamos las armas nos largamos de aquí . Le digo para que se motive.

Yo se que Dariel siempre me ha envidiado de pequeño siempre envidiaba los juguetes o ropa que tenia incluso mis amigos.
Un día llegaba del colegio cuando estaba en primaria mis padres me dieron una sorpresa era una colección de autos antiguos que hace mucho tiempo estuve pidiéndole a mi papá ya que me gustaba esa generación de autos británicos.
Dariel al ver de que a mi me habían regalado algo y a el no, hizo una rabieta de esas de que los niños llegan a ponerse morados de tanto llorar. Lloraba y lloraba con que el quería algo mejor que yo.
Yo sentí que me lo merecía ya que mis calificaciones estaban por las nubes y sin ninguna anotación negativa, estuve seleccionado para entrar a los campeonatos de basquetbol y yo era un excelente alumno. En cambio Dariel era todo lo contrario a mí, he visto que ha cambiado su forma de ser y su pensamiento. Pero no totalmente a como era antes.

Dariel sale por una ventana que daba para la calle principal para llamar la atención de los que estaba adentro, tiene ventaja ya que los caminantes son demaciado lentos.
Al salir sale corriendo con la tapa de un basurero y un palo para llamar la atención de todos lo de adentro del pasillo. Ya que ellos se guían por el oído.

Al pasar unos 5 minutos no había ningún caminante dentro, salimos en busca de la bóveda. Dafne se fue de las 1eras  ya que tiene un excelente oído, Cat atrás.

(La gente que encontramos se quedó en el lugar, la única que nos acompañó voluntariamente fue Emily.)

concentrados y nerviosos por lo que podía esperarnos delante de nosotros mirabamos a todos lados para sentirnos seguros, hasta que siento algo delante mi que me impedía seguir avanzando, era Dafne que puso su brazo para que no siguieramos avanzando y hacia señales de que no habláramos ya que los caminantes estaban en estado de invernación. Traté de controlar mi respiración porque si respiro fuerte sabran que estamos aquí.
Veo desesperado por todas partes pero como está oscuro no veo nada.
Emily me jala el antebrazo haciendo que yo vea lo que ella me esta apuntando.
Me esta apuntando una puerta de color dorada muy llamativa que estaba al final del pasillo, me susurra al oído me dice que esa es la bóveda y que se necesita un código de 4 dígitos.
Me adelanté para matar al caminante, lo encontré desprevenido así que aproveché de meterle un cuchillo por la frente y traspasar el cerebro.
Al terminar mire inmediatamente alrededor para asegurar que estabamos bien sin que preocuparnos.
Le hago una señal de que pueden avanzar y Emily corre rápidamente hacía la puerta para anotar el código, fue el paraíso y que ella era el ángel que nos salvaba.
Ella al abrir la puerta al instante voltea a verme y yo aproveché el momento y le hice una sonrisa coqueta, y la elogié, Dafne se ganó en la puerta para escuchar si estaba seguro ahí adentro fue solo 1 minuto pero fue el minuto más tenso y largo que he vivido hasta el momento.
Hace una señal de que todo esta en orden. Y pasamos rápidamente para encontrarnos con un paraiso de armas.
Todo tipo de armas largas, cortas, francotiradores, pistolas incluso una bazuca, muchas municiones, era un paraíso de armas.
Al buscar hasta la última munición pude notar que en un estante había una llave que era idéntica a la que tenía yo, la llave tenía una ubicación y era la del centro médico "NEUTRO CF17"  Me puse a pensar y encontré extraño de que el sr. Fredenson tuviera una llave igual, y me la diera para abrir la puerta de la bóveda si la puerta tenia un código. Empezé a desconfiar un poco de los que nos rodeaban, miré de reojo a Emily y dije entre mí:
-¿cómo pudo abrir la puerta de la bóveda? Si solo lo saben los generales y el sr. Fredenson no era general..
Tenía muchas preguntas y pocas respuestas.