El amor en los tiempos del coronavirus (One-shot)

CORONAVIRUS

Hay ocasiones en las que para ver el interior de una persona es necesario esforzarse sobrehumanamente, analizar sus movimientos, actitud y semblante; sin embargo, en este caso, no había que ser un genio para notar que el chico de cabello negro parado frente en la puerta de colegio que se encontraba junto a un par de chicos de su misma edad, los cuales sostenías un cartel en el que se podía leer: ¿Quieres ser mi novia?, se estaba muriendo de nervios.

- Chicos, ya sé que Margarita me va a rechazar, ¿es necesario que todo el colegio se entere?_preguntó el chico de cabello oscuro mencionado anteriormente.

- Por tu puta madre Armando, no seas marica, ¡no le pague mi mesada de un mes a mi hermana por este estúpido cartel_gritó molesto niño rubio un poco más alto que él_para que te acobardaras al último minuto!

- Tranquilo Alonso_dijo con una voz calmada y apacible un chico más pequeño que ambos de un lindo cabello marrón_no seas duro con Armando, solo está nervioso, tú también lo estabas cuando te me declaraste._finalizó con una dulce sonrisa.

Esta última declaración causó que Armando empezara a desternillarse ya que Alonso, el chico más rudo de todo el salón, grado, el colegio y tal vez del mundo se sonrojara tiernamente y volteara la cabeza avergonzado, le causaba mucha gracia.

Armando hasta ahora no entendía como es que Alonso era dominado tan fácilmente por Joaquín, un chico un año menor que ellos; y, si le costaba entender eso, para él así como también para el resto del mundo sería un eterno misterio saber cómo es que ellos dos se llevaban tan bien e incluso llegaron a ser pareja.

- ¿Pueden callarse un segundo?_preguntó Armando, harto de las tonterías de sus amigos_Margarita aún no ha salido del colegio, ¿qué tal si ya se fue?_preguntó de nuevo, esta vez más preocupado que molesto.

Alonso pareció preocuparse por eso; pero Joaquín, como siempre y a pesar de ser el menor, calmó a los dos chicos que parecían no haber evolucionado y quedándose siendo un par de Homo neanderthalensis, y los calmó con unas sencillas palabras:

- Tranquilos, Paula me escribió diciéndome que la retuvo un rato en el salón, la sacará y la traerá aquí cuando le dé la orden, es decir, justo ahora._terminó Joaquín presionando el botón de enviar en el chat de WhatsApp, mostrando al imbécil que tenía como amigo y a su dulce y amoroso novio que ya había planeado todo desde hace días. 

- ¿Qué haríamos sin ti?_se preguntaron ambos chicos al unísono.

El aludido se encogió de hombros y siguieron esperando con la mayor tranquilidad posible la llegada de Margarita, la mejor amiga y crush de Armando desde hace dos años.

Conforme pasaban los minutos, más y más gente se amontonaban para ver al trío de chicos de catorce años, cada uno con algo diferente entre las manos; Joaquín con su celular a punto de poner la canción "Un año" de Sebastián, mientras que Alonso, con una cara de fastidio extremo sostenía un cartel en que estaba hermosamente escrito: ¿Quieres ser mi novia?, y por último, pero no por eso menos importante, Armando, con una rosa entre sus manos temblorosas.

De pronto, y como si fuera una película, una chica de bellos rizos negros salió de pórtico del colegio y dirigió su mirada al enorme grupo de personas que rodeaban a los jóvenes. Ella, que parecía no entender muy bien lo que estaba pasando, se acercó al grupo de chicos y, al ver el cartel, su mirada se opacó y con una muy notoria falsa sonrisa preguntó:

- Vaya, te estás declarando, ¿quién es la afortunada?_cuestionó Margarita, la cual parecía estar al borde del llanto.

- Margarita..._empezó a decir Armando, en ese momento se empezó a escuchar la canción "Un año", lo cual lo hizo estremecer, pero a la vez le dio fuerzas de dónde no sabía que tenía para continuar_el año pasado pensé que me cambiaría del colegio, esto me dolió mucho; pero no por el hecho de perder a mis compañeros, amigos, amigas, sino porque eso significaba perderte a ti y tú eres una persona muy importante para mí, importante y especial._mencionó ofreciéndole la flor a la chica con la que soñaba.