genin days. | sasusaku.

01. Rutina.

La primera vez que esos dos habían estado a solas todo había salido mal, dejó un mal sabor de boca y los alejó de la oportunidad de empezar con el pie derecho, pero eso no significaba que las cosas no podrían mejorar entre ellos. Sakura caminaba un poco ansiosa por Konoha, dando respiros largos para calmarse antes de llegar al puente rojizo, dónde se encontraban usualmente para empezar la rutina. Se acomodaba el cabello constantemente, asegurándose de mantener una buena imagen.

—Buenos días, Sasuke-kun —, sonrió mientras colocaba un mechón detrás de su oreja tratando de dirigir la atención de él hacia su linda, rosada y cuidada cabellera.

—Buenos días —; respondió simple, cómo siempre, pero la misma rutina era lo que los mantenía cómodos. El varón miró a la kunoichi por un par de segundos antes de devolver su atención al cielo.

—Oye... —, aún nerviosa, abrió la boca, "¿de verdad era buena idea?" A veces tiene la sensación de que Sasuke la rechazará sin importar lo que ella proponga. Un rechazo tras otro comenzaba a causarle inseguridad; sacudió levemente la cabeza intentando alejar esos pensamientos negativos, a la vez que se daba ánimos internamente para continuar—: Estaba pensando...

El Uchiha notó cómo tardaba más de lo normal en proponerle salir juntos, "¿había pasado algo?"

—¡Sakura-chan! —Ahí estaba, Naruto Uzumaki, siempre tan oportuno. El de ojos azules rápidamente se percató de que estaba interrumpiendo algo y, tratando se analizar la situación, entrecerró los ojos.

—... ¡Naruto! ¡Estaba por decirle algo importante a Sasuke-kun! —La chica no tardó demasiado en mostrar su enojo al ser interrumpida de una manera tan brusca... justo cuando estaba retomando la confianza en sí misma.

—... ¿Importante? —Musitó confundido, normalmente Sakura lo hubiera hecho a un lado para hablar con Sasuke, "¿qué podía ser tan importante?" La situación era cada vez más sospechosa—. ¿Acaso...? ¿Lo vas a invitar a comer ramen? —Gritó Naruto con terror después de, erróneamente, adivinar lo que estaba pasando, ¡No podía creerlo! Sasuke no merecía algo tan grandioso cómo comer ramen a solas con Sakura, ¡No señor!

—¡No! ¡Eso no! ... Es... otra cosa —. Fue todo lo que dijo, tenía claro que debía aprovechar el tiempo para descifrar la manera en la que debía comentárselo al chico que le gustaba.

El de cabello oscuro se mantenía en silencio, y al igual que el tarado de su amigo, intentaba descifrar de qué se trataba "eso" tan importante.

Ella sabía que no era nada muy impactante cómo lo hacía parecer, pero los nervios le habían ganado y quería mejorar su relación con Sasuke.

Antes de que algo más pudiera ocurrir, llegó Kakashi, tarde... obviamente.

—¡Buenos días equipo! —Dijo con una sonrisa que se podía apreciar perfectamente aún con su máscara.

—¡Llegó tarde otra vez! —Gritaron Sakura y Naruto al unísono como cualquier otro día. Hasta parecía que se ponían de acuerdo para hacer lo mismo cada vez.

(...)

La chica de ojos verdes suspiró agotada, hicieron bastantes misiones durante el día; lo único que deseaba era irse a casa, tomar un baño tibio, relajarse en la tina, comer y dormir. Esperaba que esta última comisión se acabase pronto.

—Sakura —. No hacía falta mirar para que ella reconociera su voz; a veces le enojaba lo fácil que la hacía sonrojar; no era su culpa, ha estado enamorada desde que lo conoció en la academia, formar equipo con él le había brindado una oportunidad única de acercarse, pero lo arruinó desde el primer momento en el que intercambiaron palabras.