BABY CRY °• - HYUNLIX

Cap III : Perdido

Ya había pasado unos meses de acoplarse a esa nueva vida en Corea para la familia Lee, todo era tan armonioso y tranquilo para los demás miembros de la familia excepto por el pequeño Felix, el cual a veces se sentía observado, más cuando se sentía sólo, nunca había pasado eso, ¿por que ahorita? ¿pasará algo malo?

Su madre decía que estaba todo en su cabeza.

¿Y si no?.

Le dolía la cabeza de sólo pensarlo, su pecho se comprimía de sólo pensar.

Deja de pensar

Su vecino ya casi no hacía apariciones, era tan raro, le daba tranquilidad no volver a verlo de nuevo, algo en su aura le decía que debía estar lejos de él.

En la escuela había hecho amigos, amigos buenos, bangchan era bueno, un buen amigo, tan lindo y atento con él, siempre hablaban de lo que hacían, felix no se callaba con lo de sentirse incómodo en casa, ser observado, cada día y noche, cada que se cambia o su cuerpo que apenas se desarrollaba estaba expuesto a las ventanas las cuales no podían ser cubiertas por algo, no había cortinas que lleguen a tapar el ventanal, estaban apenas buscando uno ya que el trabajo de sus padres era excesivo pero igual no se molestaba.

La vida que felix siempre quiso, no puede pedir más, es perfecto todo.

Por ahora.

Era una mañana reluciente, felix sentía que seria otro día genial para el, con solo decir que Bangchan lo recogería para ir a la escuela estaba más que feliz. Cambiándose a unos pantalones negros y camiseta blanca junto con unas pulseras las cuales significaban mucho, cada pulsera fue regalada por uno de sus amigos o padres, si se los ponía se sentía acompañado por ellos, era algo raro pero no le importaba. Bajando ya listo vio a su madre para sonreirle saludandola mientras se sentaba.

—Alguien se levantó contento.—hablo con una suave voz su madre.

—Si! Por cierto hoy me llevara a la escuela la madre de bangchan..—le sonrió comiendo.

—Vale, me hubieras avisado antes.

—Perdona madre..—sonrió agradeciendo por la comida empezando a comer.

La mujer sólo sonrió para empezar a lavar los trastes, el menor al acabar de comer se levantó despidiéndose de su mamá para salir viendo el auto de su amigo esperándolo, camino por el pasto recién cortado que emanaba un olor a tierra mojada y nuevo, adoraba ese olor. Miro de manera ladina la casa de su vecino viéndolo tranquilo subiendo algunas cosas al auto, dudo en hablarle pero al final lo hizo.

—Buen día señor Hwang! Se ve bien hoy!—exclamó.

Recibió una mirada del chico de cabellos largos y una sonrisa amable, suspiro aliviado para subirse al auto con su amigo saludándolo junto a su madre, el día era húmedo por que en la madrugada el cielo empezo a llorar, lagrimas frías, pero con sol, era un día agradable, perfecto.

Apenas llegaron se bajaron recibiendo un...

—Que pasen un buen día niños.

Hablo la señora Bang hacia los chicos los cuales se despidieron, la mujer se quedó sola con su hija la cual jugaba con sus juguetes, aun era pequeña hanna.

—Nos vemos luego Felix?.—sonrió bangchan.

—Claro Chris..-asintió devolviendole la sonrisa.

Ambos fueron a sus aulas, todo era.. normal, nada podía pasar hoy.

Al finalizar todo felix salió primero que todos, primero que Bangchan,  aun no era hora para la salida así que no tenía nada que hacer, aparte de sentarse a esperar la hora esperada a que todos salieran de aquel edificio al que llamaban escuela. Aburrido, apunto de dormirse se paro dignado a querer ir algo de comer, olía a unos metros a una comida deliciosa, dio solo unos pasos y un auto el cual había visto tiempo atrás se estacionó afuera, alejándose un poco por la impresión.