Capitulo 1

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Laurence

— Él pinta con su propio semen, ¿sabes?

El comentario vino de la nada. Laurence desvió su atención de la pintura al óleo hiperrealista, de un joven tendido en un sofá viejo en un apartamento sucio, para seguir la voz a su derecha. Momentos antes, había estado solo, haciendo todo lo posible para averiguar qué tipo de "enriquecimiento profesional" pensaba Elaine que podía obtener de un paseo en solitario a una galería de arte. El arte era deslumbrante, le daría eso, pero no estaba seguro de qué se suponía que debía hacer con su aprecio por él, o cómo aplicar ese aprecio a su trabajo.

Ese sería un misterio para otro día. En este momento, había otro asunto que atender, específicamente el joven que había salido de la multitud para pararse a su lado.

Su compañía era inesperada, pero no desagradable. Su declaración, al menos, le dio a Laurence algo para reflexionar aparte de los pensamientos sobre el aumento que deseaba obtener. —¿Pinta con su propio semen?

—Asi es. —El extraño levantó la barbilla e inclinó la cabeza hacia un lado, como un ave de rapiña considerando un objetivo cercano. El ángulo agudo de su mandíbula y el puente de su nariz larga y estrecha se sumaban a la ilusión: se adaptaban a su rostro, y Laurence pensó que se veía encantadoramente como un halcón, agresivo. —Al menos, eso es lo que he oído. Creo que se toma demasiado en serio la idea de que los artistas ponen una parte de sí mismos en todo lo que hacen. ¿No es así ?

—No estoy seguro de creerte.— Laurence apartó la mirada del joven y volvió a mirar la pintura. La presión se apretó en su estómago, no del todo desagradable. Le tomó unos momentos darme cuenta de lo que era: se sentía agitado por la excitación. —No soy un experto, pero creo que la pintura al óleo es temperamental. Los aceites corporales y los ácidos destruirían su composición. El fluido seminal es alcalino, básico, lo opuesto a ácido, pero está compuesto de múltiples componentes. Supongo que, en pequeñas cantidades, no interferiría con la pintura, pero los artistas trabajan con pequeñas cantidades de color a la vez, ¿no? El tamaño de este lienzo y la complejidad del color me hacen creer que la cantidad de pintura en comparación con el volumen estándar de eyaculación no habría sido aceptable: el semen habría inundado la pintura y la habría destruido. Esta pintura se ve demasiado bien para haber sido hecha con un producto en descomposición. Aquí no hay signos de fallas: no hay grietas en la pintura, ni fisuras, ni descamación... es impecable y magistral. No sé si puedo apoyar la idea de que hay semen mezclado. Es demasiado perfecto para ser verdad.

Había silencio. Laurence se mordió el interior del labio y miró al extraño por el rabillo del ojo. Había ido demasiado lejos. Había matado la conversación, como siempre lo hacía, porque no podía dejar ir la parte lógica de su mente y simplemente divertirse. La mitad de él esperaba que el extraño se hubiera ido, desapareciendo entre la multitud que los rodeaba para escapar de su incomodidad, mientras que la otra mitad esperaba un rechazo incómodo y confrontativo. No era la primera vez que hacía que alguien se sintiera incómodo y se veía obligado a soportar las consecuencias .

Pero ese no resultó ser el caso .

En cambio, encontró al extraño mirándolo, con los ojos entrecerrados en alarmada confusión. Debajo de esa expresión, pensó que podía vislumbrar asombro. Brillaba en sus ojos y juntaba sus labios, como si estuviera a punto de hablar. La conmoción suavizó parte de sus rasgos de halcon y reveló a un individuo que parecía vulnerable. Entonces, repentina y arbitrariamente, como cuervos que se sobresaltan y vuelan lejos, la confusión en el rostro del extraño se rompió y se disipó. Se pasó una mano por el cabello negro, luego sacudió la cabeza y se rió entre dientes. Laurence pensó que el sonido era agradable y genuino, como si fuera divertido en lugar de incomodo. —Entonces, eres un artista.

𝘌𝘭 𝘱𝘳𝘰𝘣𝘭𝘦𝘮𝘢 (𝘰𝘮𝘦𝘨𝘢𝘷𝘦𝘳𝘴𝘦)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora