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Alrededor de la madrugada se despertó desconcertado Kazutora, el sabor de agrio en su boca lo inquietaba y quería desaparecerlo
Con cuidado salio de la cama para no despertar a ambos chicos que dormían plácidamente, se dirigió al baño para luego cerrar la puerta despacio. Mientras votaba todo lo que había comido hace ratos se miró al espejo, se veía horrible y su olor era de mierda
—Tengo que bañarme, este olor a vomito realmente es desagradable... —abrió la llave para ver como el agua caí en la bañera.
El Omega se quito sus prendas dejándolas en el suelo para meterse con cuidado a la bañera, sacó el jabón y shampoo, al ver que ya estaba demasiado llena decidio mejor cerrar la llave para de una vez bañarse
Primero remojo su cabeza agarro agua con la taza que tenía, el agua estaba tibia ya que había encendido el calentador
—Mmm se siente bien. —murmuró y se coloco el shampoo en su cabellera.
Frotó con las yemas de sus dedos en la cien de su cabeza para luego agarrar el jabón y frotarlo contra su piel
Estuvo unos cuantos minutos mirando el reflejo del agua y pensó, ¿Acaso sería buena idea quedar embarazado de esos dos Alfas hormonales? No, claro que no lo seria y le traería consecuencias, le desagradaba la idea de perder sus estudios por culpa de ellos. No lo iba a permitir, pero que pasa si realmente lo está ¿Toda su vida estaria al borde del abismo? Empezó a temblar de pánico, se abrazo asimismo y tenia mucha ansiedad que no pudo más para empezar a arrañarse los brazos con sus no tan largas uñas
El pánico había abordado en Kazutora que sus pensamientos iban con negatividad
Sus brazos comenzaron a brotar sangre que caían gotas tras gotas al agua
—Kazutora. —la voz resonó por todo el baño haciéndolo regresar y poner su vista a la puerta.
—¿Que haces bañandote a estas horas? —lo miro y vio sus brazos— ¡Mierda Hanemiya, Tus brazos!
—¿Uhmm? —sus ojos se posaron a sus brazos y estaban sangrando.
El peli-negro se acercó rápido al bicolor para agarrar sus brazos y mirarlos
—Tengo que cortarte esas uñas que tienes, no quiere que te hagas daño. —le propinó un beso en sus labios.
—Lo siento. —musito con la cabeza baja.
—Tranquilo, déjame te termino de bañar y curo esas heridas. —agarró la taza que estaba flotando en el agua.
El bicolor solo asintió y volteo la cabeza mirando el extremo de la bañera, Baji solo suspiró para luego dejar caer el agua en la cabeza del bicolor, con su otra mano acariciaba la espalda del Omega. Eso hizo que se estremeciera en su lugar y sonrió por eso, siguió bañandolo hasta terminar de hacerlo y secarlo con la toalla
Al rato lo cargo y lo acostó en la parte vacía de la cama, rebusco en los cajones y saco una pijama por mientras acompañado de su bóxer. Se lo entregó al bicolor para que este se cambiará yendo a buscar el botiquín y sacar vendas junto el desinfectante de heridas
El Omega estaba ya cambiado, el Alfa peli-negro lo agarro del brazo y subió su manga para empezar a curarlo poniéndole las vendas al ya desinfectar la herida
El azabache guardo el botiquín para luego acomodarse en la cama y jalar a Kazutora a su lado, le dio besos en su cara haciendo soltar risas al bicolor
—Basta, me haces cosquillas. —se apego a su pecho.
—Duérmete un rato, van a hacer las 5 de la mañana. —dejo un beso en la cabeza del Omega.
—Bueno. —sonrió para luego cerrar los ojos y quedarse rápido dormido.
El azabache solo soltó una risa y acariciaba la espalda del bicolor, empezó a olfatearlo, pero que raro, su olor había cambiado a leche y era muy exquisito, por lo que el sabía cuando los Omegas olían a leche es porque estaban embarazados. Miro a su Omega y pensó ¿Acaso el estaria en gestación? Naa solo lo hicieron una vez, no creyó que llegara a estarlo y se durmio
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Aviso que la historia ya está dígamos por pronto acabar.
