La oscuridad del pasillo era iluminado por el mar de estrellas, enorme casi infinito. Su luz se filtraba por las ventanas y creaban un ambiente nostálgico, de paz casi romántico.
Mientras caminaban por este, Hazel no sabía cómo empezar a hablar lo que tanto había planeado decirle, no hace mucho, Eva su amiga de incontables aventuras, le hacia sentir algo muy extraño, como una presión en el pecho dejándolo casi sin habla cuando la veía.
Se habían conocido en la academia de estudios espaciales en Rinuus II mientras estudiaban para convertirse en exploradores hace 6 años. A pesar de tener especializaciones diferentes, Hazel era biólogo y Eva ingeniera, pasaban la mayor parte del tiempo juntos.
Cuando se graduaron fueron recomendados para unirse como pasante a la nave Coeus, (llamada asi en honor al titan griego de la inteligencia), la cual era la nave de exploración más avanzada hasta la fecha, con la misión de explora el sector Gamma de la galaxia, un sector poco explorado debido a una barrera invisible que destruía todo lo que tocaba y se extendia por todo el sector, pero con recursos muy importantes para la FETL (Federación Espacial de Territorios Libres) quienes habían encontrado un portal de ingreso en el planeta Icarus. Del inicio de la misión a este momento había pasado 1 año.
-Sabes, leí en un libro que en la tierra las noches eran iluminadas por luciérnagas-
-Luciérnagas?-
-Insectos terrestres con bioluminiscencia-
-Pues me gustaría ver esas luciérnagas algún día- le respondió mientras le daba una sonrisa seguida de un silencio que hacia compañía a luz tenue de las estrellas
-Y cómo te fue con el experimento de plasma?- Pregunto Hazel
-Muy bien, descubrimos algunas propiedades del elemento nuevo que encontramos en Dhurn en la expedición de hace 2 semanas, sus átomos eran............-
Hazel solo puso atención en el inicio de la explicación, no porque no entendiera o porque no le interesaba, no todo lo contrario. Se había perdido en los ojos de Eva inmensos y brillantes como el mar de estrellas por el que estaban pasando
Hazel solo podía ver los ojos plateados y un poco rasgados de Eva, color característico de los habitantes de Rhinuus producto de la falta de luz natural, su cara pálida adornado con un rubor natural en sus mejillas. Su cabello suelto negro y lacio con algunos mechones plateados con el cual jugueteaba con sus dedos mientras hablaba. Su cuerpo era delgado, otra característica de su planeta. Su vos era de un tono muy suave casi apagado
-Una mujer perfecta- pensaba Hazel.
-Oye, estas bien, si me entendiste, perdón creo que te aburrí- Dijo Eva
-No, si entendí, me perdí en un momento pero si logre entender- respondió Hazel sin tener idea de lo que estaba hablando
-Te encuentras bien, parece que estas en otro mundo, acaso quieres decirme algo? Últimamente has estado muy distraído cuando hablamos-
Ella lo conocía demasiado para no notar lo que Hazel sentía, era muy obvio pero ella pretendía no saberlo porque le parecía muy lindo y romántico saber que su amigo estaba enamorado de ella.
Al igual que Hazel, Eva también sentía algo por él, siempre lo había sentido, no sabía que pero desde que abordaron la nave se dio cuenta de lo que era, sus almuerzos juntos, las caminatas por la nave y las noches de películas en la que se quedaban dormidos juntos habían afirmado lo que sentía. Ella lo amaba como él la amaba.
Hazel al ponerse nervioso junto a Eva no había notado lo nerviosa que Eva se ponía a su lado
-Sí, hay algo que quiero decirte- dijo Hazel sin pensarlo casi como por impulso las palabras solo salieron de su boca.
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Mar de Estrellas
Science FictionExiste un lugar en la galaxia llamado el Sector Gamma, o Mar de Estrellas, debido a su abundante número de cuerpos celestes que brillan con intenso color azul marino pero rodeado de una barrera invisible que destruye todo lo que la traspasa. El luga...