Touch Me (KNY)

★Verdad o Reto

★ Personajes: Lunas demoníacas

★ Nota: Ni cara para pedir disculpas por mi desaparición, básicamente porque no fue tanto mi culpa, equis, pasan que cosas... Esto más que nada lo escribí como ocio, algo para matar el rato y me termino gustando, así que por eso lo subo. No esperen mucha seriedad.

La música que resonaba en los altavoces hacia temblar las paredes de la enorme casa que servia como residencia de los estudiantes en la facultad de derecho. La fiesta había empezado temprano y podía notarlo al ver a algunas personas tiradas en alguna esquina de la residencia con tragos a su alrededor o simplemente desparramadas en los sofás.

Su amigo - si es que podía considerarlo de esa forma con solo dos días de conocerse en algún bar de la ciudad - Rui, le hacia señas con la mano extendida para que se acercara al círculo que había formado en el suelo junto a los que parecían ser sus compañeros, cada uno con un rostro más temible que el anterior. Los saludo con una sonrisa nerviosa y tomó asiento junto al peliblanco luego de aceptar la lata de cerveza que le había entregado.

Le había presentado a todos los presentes, entablando rápidamente conversación con estos gracias a su personalidad extrovertida y el alcohol que recorría sus venas. Daki, la peliblanca con mechas verdes que se encontraba anteriormente sentada a su lado, se levantó para ir en busca de una botella y su lugar fue ocupado por quien reconoció como Enmu, un chico cuya sonrisa le perturbaba más de lo que le gustaría, pero nada que no olvidara luego de otras 5 latas de cerveza. Cuando la de mechas regreso tomó asiento al lado de su hermano en el otro extremo del círculo y colocó la botella en medio antes de explicar las reglas básicas del juego - nadie podía negarse a realizar el reto o responder la pregunta seleccionada o tendría un castigo que podría implicar su expulsión de la facultad - si... Ellos sabían como llegar a los extremos en un juego de niños.

- Olvide decirte, ten mucho cuidado con Douma. - Susurró Rui en su oído cuando su cabeza tocó el hombro de su acompañante.

- ¿Quién es Douma? - La pregunta salió con duda, unos tonos más altos de los que hablaría normalmente debido al fuerte volumen de la música y que no pensaba agachar su rostro para hablar en el oído del más bajo.

- ¿Preguntaban por mi? - Habló una voz detrás suyo, cantarina, electrizante, como una sirena que intentaba engatusar a sus enemigos. Al darse vuelta sus ojos chocaron con el arcoiris que formaban los del rubio que le regalo la sonrisa más deslumbrante que había visto, sus mejillas adquirieron un color rojizo y este camino hasta arrodillarse frente a su cuerpo. - ¿Con quien tengo el honor? - Sus manos fueron apresadas por las del rubio y aquella sonrisa seguía sin desaparecer de su rostro dándole un aura angelical y perfecta.

- Se llama Yume y viene conmigo. - Interrumpió Rui mientras con un manotazo lo obliga a soltar las manos de su amiga, provocando una mirada molesta en el mayor y que este se alejara gritando por Akasa y sus malos modales al no saludarlo. - Te dije que tuvieras cuidado con él.

- ¿Por qué? Es un ángel.

- No lo es, es un idiota que sabe engatusar a las personas.

- Yo me dejo.

El regaño que venía de parte del peliblanco fue interrumpido cuando Nakime algo tímida preguntó quién girará la botella en la primera ronda. - Que lo haga la nueva, como bienvenida. - La voz ronca de Gyutaro llegó a sus oídos y poso su mirada sobre este que miraba el techo distraído con su hermana recostada de sus piernas.

Asintió al ver que nadie puso alguna queja y extendió su brazo para poner a girar la botella... - ¡Gira gira botellita! - Apremiaban los mayores de manera infantil, como si sus palabras fueran las que provocaran el movimiento y no la acción que había realizado con sus manos. La punta de la botella se detuvo apuntando al pelirrojo, Akasa si mal no estaba y de inmediato la voz cantarina de Douma resonó en sus oídos. - Tengo el reto perfecto para ti, Akasa-Dono.