Como entrenar a tu Lobo bestia

Capítulo 3: Un nuevo día

Los primeros rayos de sol comenzaban a subir por la tierra de Mystica y centrándonos en una habitación que consiste de un armario ubicada en la pared, cerca una mesa de trabajo dónde hospedaba su espada retráctil y una cama sujeta al techo por soga de cuero resistente con sábanas moradas rojizas y almohada rojiza anaranjada dónde se encontraba Sunset acostada encima de su cama boca abajo con un ojo a la vista fuera de su almohada ya abierto sin parecer haber dormido mucho o siquiera nada al estar sumisa en sus pensamientos

— «¿Por qué...? ¿Por qué me pasó esto a mi?» —su ojo se mueve a ver la joya colgada junto a la ventana y el resto de la esfera de la Joya Eléctrica Artificial— «Desperdicie mi única oportunidad de arreglar mi vida pero... ¿Por qué... Por qué se sintió bien dejarlo vivir?»

— Me gusta pensar que las acciones que hice en mi vida fueron buenas, intentando ayudar a los demás pero siempre acabando en lastimando a otros, como todo lo que dijiste sobre que atormentaba a tu reino, y como prácticamente ya no me queda nada por la cual vivir, me gustaría despedirme del mundo creyendo que ayudare a alguien por una vez

— «El Destello Azul... ese tipo... ¿De qué quería ayudar? No parecía referirse a las demás lobo bestias» —su ojo se entrecierra levemente por ese pensamiento— «¿Las demás lobo bestias son iguales a él?»

Una zona explota con un fuerte relámpago azul con varias lobo bestias salir volando

Se entrecierra más el ojo ante el recuerdo, se levanta medio pesada de la cama aun con su mirada fija en la Joya Eléctrica

— «Necesito respuestas, y para ello necesito encontrarlo de nuevo» —con su enfoque más decidido sale de la habitación.

Se busca la espada seguido de guardarlo dentro de su cuero y en el momento que abre la puerta se encuentra cara a cara con la capitana de los Wonderbolts

— ¡Spitfire! —reacciona sorprendida por la repentina aparición— ¿Qué... —voltea un segundo a la Joya Eléctrica Artificial antes de mirar a su hermana— haces aquí? —al terminar la pregunta sale de su habitación y cerrando la puerta— Quiero decir, aquí, justo frente a mi

— Hay algo que tenemos que discutir —responde seriamente Spitfire.

— Dejame adivinar —se cruza de brazos ya con una expresión medio aburrida— quieres que permanezca quieta aquí o que trabaje en mi taller sin que haga nada extraño para nuestro reino mientras tu estás fuera buscando la madriguera de las lobo bestias

— Mayormente —confirma Spitfire con Sunset apartando la mirada molesta— pero hay cosas de por medio, una es que iré a la posible y verdadera madriguera de las lobo bestias

— ¿Qué? —vuelve a verla ahora con sorpresa— ¿Estás muy segura de eso? Hay como varias variantes sobre dónde se originan las lobo bestias por los constantes viajes que hacen en manadas —la señala con el dedo índice para enfatizar sus palabras— lo sabes perfectamente por toda esas diatribas que realizó Twilight

— Lo sé —responde con calma al bajar la mano e ignorando la informalidad de su hermana— pero también nos dijo que toda manada poseen un alfa, alguien que los guíe, y la princesa Celestia estaba muy confiada sobre la ubicación de la madriguera y quiere que lideré la expedición junto con el grupo de la maga Twilight

Sunset pareció agitarse con una mirada preocupada, cosa que Spitfire responde apoyando una mano sobre el hombro, permanecen en silencio por unos momentos

— Ojala acompañarte... —dice Sunset sin mirar a su hermana.

— Pero no podrás al estar ocupada con otra cosa.

— ¿Exactamente con qué? —pregunta confundida y levantando la mirada.

— Estarás entrenando para matar lobo bestias —se cruza de brazos levemente y cerrando los ojos— al final se te concedió tu deseo