Querida Abigäil:
Solías llevar vestidos.
Mi preferido era uno negro de manga corta. Era ajustado hasta la cintura, donde se habría con un pequeño vuelo hasta la rodilla. Este, junto a las botas de combate con las que lo combinabas, resaltaba perfectamente tu pálida y apetecible tez.
Un día te dije que me gustaba, pero no me respondiste. Ni si quiera me escuchaste.
Dolió.
-Leid.

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Abigäil .
Short Story"Llevo un mes sin verte. Ni a ti ni a tu sonrisa, la que me mata y me da vida. No me hagas esto, por favor."