Es la primera vez en la vida de Jean que hacer fila en la caja del supermercado termina en un estruendoso golpe en su cabeza.
O, bueno, no la primera. Si es honesto y tiene en cuenta su infancia, entonces existe más de un recuerdo de su madre dándole un ruidoso zape por meter cosas en el carrito que no deberían ir. Aunque su madre le pegaba despacito (a pesar del ruido), como una advertencia y un regaño tonto, y Jean sonreía triunfal porque al final Ivette siempre terminaba llevando alguno de los chocolates que él había puesto en el changuito.Este golpe, por el contrario, es uno furioso, al punto de dejarlo un poco destartalado—y habría reaccionado con violencia de no ser porque está en público, y no entiende nada.
Al voltear se pone un poquito más en contexto.Mirándolo con cara de loco, ahí está Eren. Ni siquiera intercambian saludos.
Con el pelo suelto cayéndole en la cara y sin afeitarse, mirándolo entre medio de los mechones negros, Eren en verdad parece un enfermito de mierda criado en la jungla por los monos, y Jean se siente como el leopardo que está a punto de ser asesinado.
La verdad, Kirschtein no recuerda cuándo fue la última vez que lo vio así de desarreglado, si es que alguna vez siquiera lo vio.—¿Por qué mierda me bloqueaste? – El tono de Yeager es demandante, y hasta se siente un poco de dolor detrás del mismo.
Jean, habiendo recalculado un poco ya, finalmente abre la boca para contestar, mientras la cajera (que está atendiendo a una viejita) los mira de reojo, lista para llamar a seguridad en cualquier momento.
—LA CONCHA DE TU MADRE, EREN. ¿Cómo me vas a pegar así? – reclama, mas no se atreve a darle el golpe seco que se merece en la frente porque sabe que Eren no tiene autocontrol y de verdad van a terminar peleándose fuerte si uno de los dos no se frena. Y, como siempre, el más pensante tiene que ser Kirschtein.
—Te hice una pregunta. ¿Qué te pasa? ¿Tanto miedo te va a dar ver a un chabón en bolas? Bien que te he visto chupando pingas detrás de la escuela y nunca se te vio muy asustado.Ante esto, Jean frunce el ceño. En primer lugar, eso fue una sola vez. En segundo, ¿qué clase de persona dice algo así en público?
—Eren, de qué mierda habl-- – exasperándose por lo extraño de la situación, termina suspirando a mitad de la palabra. Se lleva una mano al rostro y niega varias veces, no pudiendo creer el nivel de esquizofrenia que Yeager maneja. —No entiendo qué tanto te puede importar si te bloqueo o no, si igual nunca hablamos. – Eren no cambia su cara de trastornado, y Jean empieza a perder seguridad de que esto se pueda calmar. A decir verdad, tampoco le importa. Si tenía algo de energía cuando se levantó, ahora se le drenó por completo, y no va a perder el tiempo tratando de tranquilizar a Eren, de todas las personas. —¿Y no lo puedes preguntar bien, como una persona normal?
—¿Qué sabes tú de ser normal? Te mando una foto para que me digas qué te parece y me bloqueas. ¿De qué normalidad hablas? Además, ¿qué pedo con tus respuestas? ¿A quién más le iba a mandar algo así? Imbécil.
Jean, estresado e incrédulo por partes iguales, apenas puede hacer cara de "¿eres o te haces?". —¿Qué?
Eren tampoco puede creerse la estupidez de Jean.
—Jean. ¿Nunca te llegó una fotopolla o qué? ¿Qué se supone que hagas, hmm? Debes coquetear. Pero yo no te mandé una foto tan explícita porque sabía que me ibas a mandar a la mierda, ¿tanto te costaba seguir el juego?
—...
Jean entiende menos que antes. Y que Eren parezca conspiranoico explicando lo que sucedía en su cabeza en aquel momento, no ayuda en nada.
—¿Eh? ¿De qué hablas?
Yeager expresa su estrés de forma bucal, gruñendo cual oso a punto de matar, y Jean cae en cuenta de que siguen en público y la cajera los está mirando.
Antes de que pueda señalar esto, Eren grita.
—ESTABA CALIENTE, JEAN. QUERÍA QUE ME DIJERAS QUE QUERÍAS QUE YO TE COGIERA, ENTONCES YO IBA A IR A TU CASA, PERO ME BLOQUEASTE COMO EL PUTO COBARDE, GAY REPRIMIDO QUE ERES.
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Encuentros.
FanfictionJean quisiera dejar de pensar tanto cuando está cerca de Yeager, pero es de esta forma que se distrae de lo ruidosos que llegan a ser sus latidos. Jean x Eren. (shingeki no kyojin, au moderno.)