Green Rabbit (vigilante quirkless)

2- Hospital

Importante:

Deku tiene actualmente 17 años y Bakugo está en 2A. Además, Mineta no existe en este fanfic

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POV Izuku

Entré por mi ventana. Podía escuchar a mamá abajo haciendo comida. La patrulla de hoy tardó más de lo esperado y fueron casi 6 horas.

Me vestí para la escuela. Voy a Aldera Junior High, los niños allí eran pura maldad. Pero después de que Katsuki Bakugo y sus matones se fueron, finalmente me liberé de la intimidación. Desafortunadamente, todavía no tenía amigos. Nadie quería ser amigo de un quirkless como yo. 

Me sacudí de mi tren de pensamiento y bajé las escaleras. Estaba en silencio. No escuché a mi mamá en ninguna parte.

Entré en la cocina. Mi madre yacía en el suelo, inconsciente. Corrí hacia ella, entré en pánico y comprobé si tenía pulso. Fue lento, pero ella estaba viva. Dejé escapar un suspiro de alivio. 

Rápidamente marqué el número del hospital de emergencia y la llevé afuera. ¿Qué le pasaba? ¿Qué pasó y cómo no me di cuenta? Llegó la ambulancia y rápidamente la subí.

Esperaría hasta más tarde para hacer preguntas.

Salto de tiempo (en el hospital)

El médico se acercó a mí y me informó sobre el estado actual de mamá...

Tenía una hemorragia interna... 

No saben la causa, pero fue fatal...

Se estaba muriendo. 

Me puse a llorar. Nunca lloré. Ni siquiera cuando Bakugo me estaba intimidando. No cuando fui golpeado por mis compañeros de clase. No cuando papá se volvió loco. Ni siquiera cuando me lesioné durante mis patrullas. 

Mamá era la única persona que quedaba que se preocupaba por mí. No podía permitirme perderla también. 

Entré en la habitación y corrí hacia ella. Estaba en coma. Los médicos dijeron que duraría unos meses. Me senté allí y lloré. Debería haber sido un mejor hijo. Debería haber tratado de reparar nuestra relación. Pero ahora ella se estaba muriendo y no podía hacer nada para ayudar. 

Después de unas horas, me acerqué al médico.

"¿Cuánto tiempo le queda?" Pregunté.

Traté de mantenerme fuerte por ella, pero mi voz se quebró al final y todavía estaba ronca por llorar.

El médico me miró lastimosamente.

"10 meses como máximo".

Asentí con la cabeza en comprensión. El médico me dejó con mamá. Llamé a la mamá de Bakugo. Mitsuki Bakugo. Ella y mamá eran muy cercanas.

Su hijo, Katsuki, y yo solíamos estar cerca también, pero cuando descubrió que era peculiar, comenzó a intimidarme. Nunca se lo conté a mamá. Tampoco creo que Mitsuki lo sepa.

Le expliqué la situación y pude escucharla llorar un poco por teléfono. 

Ese fue el día en que mi vida cambió para siempre. 

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¡Espero que todos hayan disfrutado!