継承: Herencia. ꚸ ・ » sungsun «.

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Días atrás...

— Papá Tae, ¿está seguro que pueden cuidar de Hyeongjun?

— La pregunta ofende, Sunoo, es nuestro nieto, por supuesto que lo cuidaremos bien.

— Lo siento, no estoy acostumbrado a separarme de mi niño.— Hace un pequeño mohín.

— Lo entiendo cariño, pero sabes que estará bien aquí, no estará en mejores manos que con sus abuelos.— Taehyung sonríe acariciando la espalda de Sunoo, haciendo que sonriera bajito.

Jeongguk y Sunghoon miraban con diversión a Sunoo y su momento sentimental, mientras Hyeongjun se concentraba en mirar fascinado las mariposas que pasaban por el césped de la gran casa de sus abuelos, mientras los mayores se encontraban en la entrada principal.

— ¡Junnie, ven acá!— Sunoo le habla a su hijo haciendo que corriera hasta llegar a él y se arrodilla para estar frente a su hijo.— Bebé, pórtate bien, abuelo Ggukie y abuelo Tae te cuidarán esta noche, papá y yo vendremos mañana por ti.

— ¡Está bien, papá Sunnie!— Sonríe grande haciendo que los mayores sonrieran con ternura.

Sunoo y Sunghoon duran un par de minutos más despidiéndose de su hijo, dejando que después fuera a jugar al patio trasero junto con la nueva mascota familiar, un lindo perrito pomerania llamado Yeontan.

La joven pareja aprovecha que Hyeongjun estaba distraído, despidiéndose de Jeongguk y Taehyung para después subir al auto y partir camino hacia el restaurante.

— ¿Hiciste reservación, amor?

— Sabes que no la necesito, Sunnie.

Sunoo rueda los ojos divertido, su esposo aveces podía ser muy engreído.

Después de unos minutos más entran de nuevo a la ciudad y no tardan mucho en llegar al elegante restaurante.

Sunghoon se apresura a abrirle la puerta a su esposo, haciendo que Sunoo sonriera con mejillas sonrojadas y le agradeciera con un beso en los labios.

Ambos chicos entran tomados de la mano, siendo recibidos cordialmente al instante, pues la familia Park al ser muy conocida, todos los integrantes estaban acostumbrados al buen trato por parte del personal de cualquier lugar que visitaran.

Eso era algo con lo que Sunoo aún lidiaba, cuando aún eran estudiantes hace un par de años atrás, al conocer a Sunghoon, él sabía que las influencias de la familia de su esposo eran muchas y que eran conocidos, pero al casarse con él, conoció la verdadera vida que llevaban.

Sunoo aprendió mucho de eso, ya acostumbrado a las elegantes cenas de negocios, o a las juntas en distintos países reconocidos, así como el aprender otros idiomas —Que hasta ahora era el inglés y japonés, además de su lengua natal.— y muchas otras cosas más.

Ambos son encaminados a una de las mejores mesas del lugar, sentándose en ella, mientras servían un poco de vino en las copas y les traían la carta del menú del sitio.

La cena empieza muy bien, todo iba perfecto hasta ahora, habían pedido su cena, perdiéndose en distintas platicas entretenidas mientras comían o tomaban su bebida.