capítulo 13: Veneno

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Durante las últimas dos semanas nuestro dúo de amigos tuvieron algunas oportunidades de verse tanto en el arcade, donde solo llegaron a verse para saludar y desearle un buen día al otro. Esto porque Selever llegaba más temprano que Kapi para poder terminar sus labores antes de entrar a sus clases, los únicos días en los que cumplía con el mismo horario de llegada que su compañero era el día jueves, durante el resto de la semana sus encuentros eran más cortos.

Buenos días — Se anunció el felino tras cruzar la puerta principal del arcade y toparse con un chico de mirada brillante quien iba rumbo hacia donde él estaba — Ten suerte en tu proyecto, amigo — le regaló al chico un sonrisa, demostrándole también la confianza que tenía en que lograría sacar una buena nota.

— ¿Crees que necesito suerte? Te lo agradezco pero tú y yo sabemos que mi fuerte es la geometría — hablo despreocupado pues sabía muy bien que lo lograría. Había estudiado mucho lo suficiente y estaba más que preparado para su presentación. Su única preocupación era lo poco que faltaba para finalizar el año escolar y la lluvia de exámenes que tendrían — igual, es mejor que inicies el aseo en el baño. Te eche una mano con eso y aproveché que tenía tiempo para barrer un poco el suelo.

— Gracias por eso. Te lo compensaré y te compraré un refresco esta tarde. ¿Te recojo de la escuela y vamos? — últimamente Kapi pasaba por la escuela de Selever a la hora de la salida y le llevaba algo de la tienda, ya que este le había contado lo agotado que salía de su instituto y luego volvía a su casa casi sin energía, entonces el felino lo llevaba a la plaza a comer chucherías juntos. Le daba a Selever cosas con azúcar para que recuperará energía para volver a casa caminando.

Hoy no puedo. Tengo tarea pendiente por terminar — expreso su disgusto por cancelar los planes del más bajo — de igual forma, mañana entro tarde a clases así nos veremos aquí para hacer la limpieza y nos quedará tiempo para jugar un rato. Aplastemos al malparido simio — alzó su puño frente al contrario y este le respondió el saludo golpeando su puño también.

[***]

Por las calles pacíficas de la ciudad caminaba el albino dispuesto a llegar a su casa tras culminar su periodo de clases. Tan agotado como siempre sabía que debía resistir pues recién iniciaba su caminata. Sentía su cuerpo más pesado y lento que de costumbre, pese a que había pasado la mitad de su día sentado, tanto en clases como en el receso aprovecho de descansar. Llegó un momento en el que se sintió tan débil que tuvo que detener su caminata. Recargo la mitad superior de su cuerpo de un muro justo antes de un callejón. Mientras recargaba su espalda del muro sus piernas podían descansar.

La paz duro unos segundos pues ya había descubierto la causa de su cansancio tan repentino. Como si no fuera suficiente una voz conocida lo sorprendió y lo saco de sus pensamientos que le ocasionaban más tención en ese momento.

¡Selever!... ¿Que tienes? — La voz temblorosa del castaño logro que el demonio se sintiera aliviado y le brindo un poco de seguridad pues ya no tenía miedo de no llegar a casa.

Love like you do - Selkapi ♥Where stories live. Discover now