𝐂𝐚𝐩𝐢́𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐈𝐈𝐈

4 0 0
                                    

    Llegue a la casa super de lo mejor, me sentía pero tan feliz que no parecía yo pero claro, era demasiado como para ser real. Apenas llegué sentí esa vibra de mala onda, había llegado mi papá de su viaje y estaba a los gritos con su celular asi que decidi, directamente irme a mi pieza y no dirigirle la palabra hasta que deje de gritar para limpiar un poco pero cuando quise abrír la puerta para entrar, me grito:

- ¿¿¡¡Por que cada vez que llego a la casa está sucia Alex!!??

- ¿Te puedes tranquilizar?, recién llego del colegio ya iba a limpiar pero quería que dejaras de gritar para poder hacerlo.

                  Sabía que si le contestaba así se iba a enojar pero estaba tan bien que no quería que me arruinara la tarde, aunque ya estaba un poco enojado

- ¡A mi no me hables así porque no soy ninguno de tus amiguitos!

- Ya lo se, ademas yo no trato así a mi amigos. Te estoy hablando bien no te he elevado la voz ni te he insultado 

- Callate, ya está. Andate despues limpias aca y mas vale que lo hagas bien porque si no, no lo hagas

                      Medi la vuelta y me fui a mi pieza. Lo primero que hice a entrar al baño y lavarme la cara, estaba muy mal pero no porque me grito y me reto si no porque el no esta y no sabe lo que hago en toda la semana, yo lavo los platos, barro el piso, liempo mi pieza y la de el. Ayudo en la casa y nunca les causó problemas ni en la casa ni en el colegio y para todo eso trato de sacar buenas notas, por lo menos lo intento. Cuando me mire al espejo me di cuenta que estaba llorando, me siento un completo idiota pareciera que nunca les es suficiente lo que hago por ellos. Cuando salí del baño, se me había puesto la cara roja por haber llorado un rato pero me tenía que calmar porque si no mi papa se iba a dar cuenta y no tenía ganas de que me empieze a decir "sos un maricon, lloras por todo, yo no lloraba a tu edad y debería haber llorado porque a mi si me iba mal, ect". Por suerte se había quedado dormido en el sillón, así que aproveche para limpiar su pieza y la mía y después limpie el comedor. Luego de eso me fui a mi pieza y me puse a escuchar música mientras leía.

  Se había hecho las 5 y me dieron ganar de salir, así que me vestí, agarre la patineta. Estaba en la plaza que estaba cerca de mi casa cuando veo un grupo de 5 adolescentes y me parecieron conocidos todos, entonces me acerque disimuladamente y la razón por la cual me resultaban conocidos era por que eran la Vicky, el leo, la Virginia, la Cande y el Stéfano:

-¡Miren! esAlex 

- Hola chicos.

               No era tonto, los chicos, me miraron y me ignoraron pero el teto no, y me sorprendió mucho porque no nos conocíamos tan bien como para identificarme. Llevaba puesto un buzo grande con capucha y el no sabía que andaba en patineta

- ¿Vivis cerca de acá?

- Si, por acá vivo ¿como estan? porque tan callados ¿no me van a saludar?

- No te volvas dramático Alex, estamos bien

- Si boludo, no te volvas dramático, perdona que no te invitamos

- Eu chicos no sean así, el solo esta pregun~

- Deja teto, deja nos vemos en el colegio. 

                Estaba a punto de irme, no fueron capaces ni de preguntarme si estaba bien, igual si no fuese por el teto y su sonrisa, la situación hubiese  sido mucho peor y me hubiese puesto más mal de lo que ya estaba , pero en eso que agarre la patineta escuche al teto:

¿𝐂𝐨𝐦𝐨 𝐝𝐞𝐬𝐜𝐫𝐢𝐛𝐢𝐦𝐨𝐬 𝐧𝐮𝐞𝐬𝐭𝐫𝐨 𝒂𝒎𝒐𝒓?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora