𝗼𝗻𝗲 𝘀𝗵𝗼𝘁𝘀; eddie munson ✓

Mejores amigos pt2.

Advertencia: cochinae

Resumen: Eddie vuelve a tu habitación para disculpase por lo de la última vez y se sale de control.

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Había pasado una semana desde que eddie trepó por tu ventana y prácticamente se masturbó contigo mientras tú retorcías tu pobre coño en un viejo animal de peluche. no iba a mentir y decir que no se sentía culpable , era un pervertido, seguro. pero tenía conciencia. seguía repitiendo esa noche en su cabeza, cómo había trepado a través de tu ventana como un intruso en la noche, interrumpió tu sesión de lectura humeante y te bajó los pantalones cortos del pijama. había tanto de malo en eso: tus padres estaban abajo, eres su mejor amigo , apenas tenías idea de lo que estabas sintiendo, y lo más loco de todo, ni siquiera llegó a besarte. ni siquiera llegó a besarte. 
Entonces, quería arreglar un poco su mierda, ¿sabes? asegúrate de que tú y él estaban bien el uno con el otro, discúlpate por estar tan ansioso y tal vez en el futuro pueda volver a explorarte si tiene suerte.

Jura que fue allí a disculparse. Mierda, incluso te compró flores. rosa, tu favorito por supuesto. una especie de tulipán, piensa? puro, limpio, hermoso, todo lo que te representaba . los tenía encajados bajo el brazo sobre su chaqueta de cuero mientras luchaba por trepar a la ventana de tu habitación nuevamente, accidentalmente metiéndose el pie entre la madera y las enredaderas casi perdiendo el equilibrio con un "¡ Maldita sea , mierda! ” pero, no obstante, lo logró, sacando una hoja de su cabello desordenado cuando apareció en tu habitación.

no parecía haber señales de ti, pero tu dormitorio parecía existir adentro con todas las señales de tu presencia. la lámpara estaba encendida, ese familiar resplandor anaranjado lo hipnotizó, incitándolo a empujar la ventana y entrar de la misma manera que un personaje de dibujos animados flotaría después de un pastel recién horneado. una especie de disco de ballet clásico giraba al volumen más bajo y nunca dejabas las lámparas encendidas si salías; el brillo distante de tu habitación era a menudo la única forma en que eddie sabía que estabas en casa y podía invitarse a sí mismo. fue justo cuando se detuvo, su bota rozó un par de pantalones cortos en el suelo, tus bragas abiertas dentro de ellas como si acabaras de quitarte la ropa que los engranajes comenzaron a girar, pero no tuvo tiempo de soltar. su mente divaga: la puerta que se abre desde su baño,

no parecía haber señales de ti, pero tu dormitorio parecía existir adentro con todas las señales de tu presencia. la lámpara estaba encendida, ese familiar resplandor anaranjado lo hipnotizó, incitándolo a empujar la ventana y entrar de la misma manera que un personaje de dibujos animados flotaría después de un pastel recién horneado. una especie de disco de ballet clásico giraba al volumen más bajo y nunca dejabas las lámparas encendidas si salías; el brillo distante de tu habitación era a menudo la única forma en que eddie sabía que estabas en casa y podía invitarse a sí mismo. fue justo cuando se detuvo, su bota rozó un par de pantalones cortos en el suelo, tus bragas abiertas dentro de ellas como si acabaras de quitarte la ropa que los engranajes comenzaron a girar, pero no tuvo tiempo de soltar. su mente divaga: la puerta que se abre desde su baño,

maldita sea seguro que tenía que estar soñando.

"¿Eddie?"  jadeaste, apretando tu toalla un poco más contra tu cuerpo—claramente consciente de lo poco que cubría, el material atado cómodamente en tu escote y terminando en la parte superior de tu muslo. apretó el puño con tanta fuerza que los anillos se le clavaron en la piel, vino aquí por una razón.
“Sí, eh, mira, no tenía ni idea de que te estabas duchando. Mierda , en realidad solo estaba pasando por aquí... —levantó las manos a la defensiva— con grandes ojos marrones de cachorrito como platos mientras trataba de mantenerlos en los tuyos y no dejarlos vagar.