expecto patronum - chansoo (traducción) ©kysooutted

capítulo 4: cuatro

Chanyeol no le dijo a Kyungsoo lo que había pasado. Pasó todo el cuarto año evitando quitarse la camisa delante de sus amigos, tirando de la manga del uniforme y pasando demasiado calor, fingiendo que aún no había recibido ninguna marca. No le dijo a nadie más que a su hermano y esperó que la intervención divina lo ayudara en su decisión.

Changmin respondió a la carta que había enviado sobre la marca en la misma semana. Le aconsejó que le contara sobre la marca, aunque Kyungsoo no sintiera lo mismo. Eran mejores amigos y la amistad no terminaría por tan poco. Pero Chanyeol no siguió ese consejo y mantuvo ese secreto bajo llave dentro de su corazón.

Como es tradición, al finalizar el cuarto año escolar en Hogwarts, Kyungsoo pasaba parte de las vacaciones en la casa de los Park y Changmin los miraba a los dos con mucho interés cuando estaban todos juntos. Chanyeol casi mata a su hermano mientras estaba de vacaciones por eso.

"Deja de mirarnos así", se quejó Chanyeol malhumorado. “Él no sabe nada.

"No estoy haciendo nada, tonto", respondió Changmin en un susurro, temeroso de que alguien escuchara la conversación. "Tú eres el que tiene la conciencia pesada por no haber dicho nada todavía.

Y los dos siguieron intercambiando puyas y discutiendo hasta que alguien entró en la habitación y preguntó qué estaban haciendo.

"Solo estoy recordando lo estúpido y ciego que es Yeol", respondió Changmin una vez cuando Kyungsoo entró en la cocina y vio a los dos susurrando. "¿No estás de acuerdo, Soo?"

Chanyeol tuvo que contenerse mucho para no tirarle un plato a la cabeza de su hermano.

"Estoy de acuerdo", respondió Kyungsoo riendo y recogiendo la pila de platos que sostenía Chanyeol. "Chanyeol a veces no ve lo que está justo frente a él."

Pero gracias a Merlín, Kyungsoo ni siquiera sospechó. Se quedó en la casa de los Park durante una semana entera y ni siquiera estuvo cerca de ver la marca azul claro escondida en el brazo de Chanyeol.

El problema comenzó a la semana siguiente, cuando Sehun llegó de un viaje y fue a visitar a su amigo y pasar unos días con él. Sehun no era el tipo de persona que comía al límite o que tenía mucha paciencia. Por supuesto, les dio espacio a sus amigos para organizarse y armarse de valor para contarles lo que estaba pasando. El problema es que ese “espacio” terminó a los pocos días y Sehun no esperó ni un segundo más para poner a la persona contra la pared y comenzar el interrogatorio.

“Vamos, Chanyeol." Sehun sostuvo a su amigo contra la puerta cerrada de la habitación, presionando su brazo alrededor del cuello de Chanyeol. Menos mal que eran casi de la misma altura. “He esperado pacientemente, digamos, un año entero para que me digas lo que está pasando. Y no dijiste, idiota, así que hoy no ha terminado.

Chanyeol realmente amaba a Sehun, pero a veces quería golpear su linda carita.

"No sé de qué estás hablando." Fingió no saber nada y casi se arrepintió cuando vio a su amigo entrecerrar los ojos y respirar hondo.

Al segundo siguiente, Chanyeol estaba mirando al techo con dolor de espalda.

“¿Me hiciste un hechizo? preguntó, más curioso que otra cosa.

"Si", se quejó Sehun, sentándose junto a su amigo en la mullida alfombra. Tienes suerte de que no te haya pegado todavía.

Chanyeol se rió entre dientes ante el comentario gruñón de Sehun y observó cómo se abstenía de sonreír también.

“Amigo, eres ridículo.

“Al menos no soy un hijo de puta como tú." Sehun golpeó levemente el hombro de su amigo y le sacó la lengua.