Cuando una persona se propone algo pasan Miles de cosas que pueden llegar a desviarla y hacer que vuelva al principio o incluso mucho peor de dónde estaba. Debo decir que si te dejas vencer y renuncias es porque en realidad no tomaste una decisión, cómo dije al principio solo propusiste.
He organizado mis días tratando de aplicar lo que todo el mundo repite pero no explica ¿Cómo hacerlo? El primer día tuve que afrontar los celos e incluso dejar las mañoserías a un lado. Para estos momentos me ha servido primero dejar de escribir, segundo volver a mi zona de confort (en mi caso querer dormir) pero en ese tiempo use 5 minutos para repetir mi primera carta y también darme cuenta de la realidad, que las razones no son las que yo estoy decidiendo que me van a enfermar. Sino que hay muchas más razones que probablemente son por mi falta de responsabilidad, y decidí concentrarme en eso. Luego respire y me calme recordando que dormir solo me haría sentir peor y producirá hormonas que me lleven a la tristeza. Fue ahí donde mi propuesta se vuelve una decisión y me levanto. No importa si hice mínimas cosas o si me levanté tarde (pero mucho más antes de lo que usualmente me levanto) lo importante es hacer las cosas para que no sean solo ideas. El mundo necesita ver más acciones que palabras y creer en aquellas cosas que de por si ya son ciertas, y no necesitan que te las repitan.
