Relación bajo las olas del mar

Brotes de amor

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Después de que Chris y Perita resolvieran su problema y después de que la situación incómoda finalmente terminara con ellos dos juntos las cosas volvieron a estar normales en el octomódulo.
Los días siguientes fueron muy relajantes, casi no había misiones y los octoagentes no hicieron algún llamado de ayuda, básicamente fueron días bastante tranquilos; sin embargo, nada dura para siempre y un día los octonautas tuvieron que ir a una misión en el Amazonas por un cardumen de pirañas que enloquecieron por falta de alimento y comenzaron a devorar todo a su paso, intentaron tranquilizarlas pero no tenían suficiente comida para todas, por lo cual decidieron pedir ayuda a los vegimales

Tunip: *Jugando en el cuartel general*

C. Polar: *Por la pantalla* Tunip, ¿Estás ahí?, Responde

Tunip: *Contesta* Rrrukta, capitán, *(¿Qué pasa, capitán?)*

C. Polar: Un cardumen de pirañas voraces está causando estragos en el Amazonas, *esquiva* necesitamos 5,000 galletas de pescado para satisfacerlas y de paso reubicarlas, ¿Crees que pueden hacerlo?

Tunip se congeló por un momento, solían hacer muchas galletas en varias ocasiones pero nunca habían hecho 5000, pero si el capitán y la tripulación lo necesitaban entonces harían lo que fuera por ayudarlos por lo cual respondió afirmativamente

C. Polar: Bien, entonces iré a recoger las galletas una vez estén listas, *esquiva* pero apresurence por favor, cambio y fuera

La comunicación terminó e inmediatamente Tunip llamó a los otros vegimales a la cocina para comenzar a hornear rápidamente las galletas, cada uno realizaba un trabajo, hacer la masa de galleta, cortar la masa y finalmente meterla al horno, todo lo hacían a la velocidad de una barracuda, así fue por un corto periodo de tiempo hasta que se escuchó un cuenco caer y romperse, Tunip volteó para ver a Codish asustado con un cuenco de masa roto en el piso, Codish quería llorar y explicarle a Tunip que fue un accidente pero Tunip solo señaló la puerta de la cocina con su aleta pidiéndole indirectamente que se fuera, Codish se fue llorando de la cocina mientras Tunip se tallaba las sienes con sus aletas frustrado por la idea de que ahora tendrían que trabajar el doble por haber sacado a un vegimal del plan.
Una vez terminadas las galletas, Tunip las llevó al capitán el cuál las cargó en las naves para después volver al Amazonas; mientras tanto Codish se encontraba en el octohuerto escondido entre los vegetales agradecido de poder confundirse con ellos, se sentía horrible por no hacer las cosas bien, nada le salía bien solo eran errores y más errores causados por su torpeza, no entendía el porque seguía ahí si solo era un estorbo; tan ensimismado estaba en sus pensamientos que no se dió cuenta de la figura que acababa de entrar en el octohuerto, al voltear se encontró con la figura de Grouber quien rápidamente lo encontró y sonrió, Codish simplemente lo ignoró mientras el mencionado se sentaba a su lado

/Mientras tanto con Tunip/

Tunip se encontraba en los pasillos del octomódulo asegurándose de que nadie lo viera antes de echarse a llorar en el piso, eran lágrimas de frustración combinadas con tristeza, no entendía como Codish podía ser tan torpe a veces al punto de cometer errores tan graves, por mucho tiempo Tunip se hizo la idea de que la línea de confianza entre la tripulación y ellos era muy delgada, aún si decían que los querían y necesitaban tenía la inseguridad de que si cometían un error catastrófico podía significar la perdida de confianza total con los octonautas y tal vez los echarían del octomódulo dejándolos a su suerte, esa idea lo aterraba y entristecía, algo que no pasó por alto para Barrot que lo siguió para intentar consolarlo