mi corazón es tuyo- L.S.

Capítulo 4

La felicidad que en estos momentos tenía Harry era enorme, Liam le había hablado en la mañana para decirle que si podía ir al trabajo de Louis por qué el mayor quería hablar con el sobre volver al trabajo.

Después de pegar un grito que escucharon hasta los vecinos, el rizado le dijo a su mejor amiga que si lo podía acompañar. La rubia acepto con una sonrisa feliz por el, ella más que nadie sabía cuánto había extrañado a los niños.

Como Liam les había dicho, se encontraban en la recepción de la empresa de Louis. Estaban sentados en la pequeña sala que tenían ahí hasta que la secretaria de Louis les habló para ver qué era lo que necesitaban.

-¿Que Honduras linda? Aquí mi cliente, tiene una cita con el señor Tomlinson.- Ambos habían quedado en hacer parecer que Taylor sería la representante de Harry, por eso es que hablaba tan formal y lo mencionaba cómo cliente.

-¿Y ustedes son?- Les pregunta amable pero con una cara de confusión ya que no los había visto por ahí antes y por la manera de hablar de la rubia.

-¿Que quién soy yo? No, no, yo vengo siendo su representante, representante legal.- Le dijo con una sonrisa y tratando de no salir del papel formal.

-¿Perdón y quién es usted?- Pregunta ahora mirando a Harry.

Harry se encontraba fascinando mirando por todo el lugar, le susurraba de vez en cuando a Taylor para que miraba lo que el, pensó que el estar trabajando ahí sería como un sueño.

-Haber señorita, cómo que quien, mire primero que nada, el señor Tomlinson es el que nos quiere ver a nosotros, no nosotros a el, si usted es su secret- No pudo terminar la oración ya que la mujer la interrumpió así que trato de calmarse por qué estaba hablando muy rápido.

-¿A las 5:00? Ah claro, el señor Velázquez, perdón, pero sucede que el señor Tomlinson no a llegado aún, pero si gustan pueden pasar con el vicepresidente.-

-¿Vicepresidente?- La miro dudoso y después miro a Taylor con cara de "¿Que hacemos?".

-Pues, veamos al vicepresidente, me late cacahuate, ¿Por dónde le damos.- Dijo Taylor mientras sonreía y tomaba el brazo del rizado para entrar a una de las oficinas.

La secretaría les dice hacía donde está, por lo tanto los dos se adentran a la oficina que les dijo anteriormente, Harry seguía mirando todo con fascinación, mientras le decía a Taylor "mira" cada que miraba algo que llamaba su atención.

-Buenas tardes, bienvenidos.-

-Y ahora sí que, qué Pedro Pablo, ¿Quien es el vice o como?- Taylor es la primera en hablar mientras se queda asombrada al mirar a los dos elegantes hombres que estaban parados enfrente de ella.

-Yo soy, estoy a sus pies señorita.- Se acercó a ella y tomo su mano para dejarle un pequeño beso en ella.

-Ah caray, pues de una vez.- Soltó una pequeña risa. -Ay no, no se crea.- Lo miró un poco más sería tratando de entrar de nuevo en el papel.

-Encantado.- Ahora se dirigió hacía Harry tomando su mano y repitiendo la acción anterior.

-Desencantado.- Ninguno se pudo aguantar y soltaron una carcajada ambos mientras se miraban entre risas.

-Este, bueno, mire yo la verdad es que soy su representante, bueno es que a él lo legal no se le da.- Habla de nuevo Taylor hacía el vicepresidente de una manera más tranquila.

-No se preocupe, entiendo.- Les regala una sonrisa para después invitarlos a sentarse.

-Bueno entonces dígame Don vice, ¿A ustedes de verdad les interesa nuestro asunto?- Dijo ahora Harry.