[En el cuarto del Chaennie]
Rosé: (cómodamente sentada en la cama leyendo un libro)
Jennie: (gatea seductoramente hasta ella) Rosie, recuerdas que la primera vez que me puse este disfraz querías arrancarmelo
Rosé: (alza la vista) Si...
Jennie: ¿No quieres intentarlo ahora?
Rosé: Si no mal recuerdo, esa vez te enojaste cuando lo intenté
Jennie: Era porque ibamos a una fiesta, pero ahora puedes hacerlo con total libertad
Rosé: ¿Te quedaste atorada en él?
Jennie: No
Rosé: ¿Segura?
Jennie: (asiente)
Rosé: ¿Quieres que te lo quite?
Jennie: (asiente frenéticamente)
Rosé: ¿Entonces vas a dejar a un lado tu orgullo y admitir que estás atorada?
Jennie: No (se acuesta molesta)
Rosé: Pues ya estás algo morada
Jennie: Así es mi color
Rosé: (vuelve a leer) Bueno, entonces no te lo quitó
Jennie: Bien
Rosé: Perfecto
Jennie: Estupendo
(Minutos después)
Rosé: (intentando quitarle el traje a Jennie) ¡Me vale un comino tu orgullo! ¡Ya estás azúl!