Welcome to Harrison

Capitulo 8: Girasol marchito

𝑭𝒍𝒂𝒔𝒉𝒃𝒂𝒄𝒌

Layla Thompson (madre de Harry): abrio la puerta de su casa, estaba lo suficientemente agotada, aun asi se mostro siempre con una sonrisa estando frente a Harry. ―¿Donde esta mi girasoool?― cuestiono con entusiasmo esperando a que el infante fuera hasta donde ella. Layla habia llegado con un disfraz de payaso puesto que trataba de ganarse la vida de esa forma, como hacia sus chistes en la calle no recolectaba el dinero suficiente a decir verdad. 

Harry: ―MAMIIIII― exclamo el pequeño con felicidad a su vez corriendo a los brazos ajenos. 

Layla: ―Mi niño. ¿Como te fue hoy? ¿Algo nuevo de lo que deba enterarme?― 

Harry: ―Papa... ha estado encerrado en su cuarto, creo que ha estado llorando...― 

Layla sabia perfectamente la razon por la cual su esposo se encontraba de dicha manera y es que recientemente le habian quitado todo, su trabajo, pertenencias, etc. En pocas palabras, la familia Thompson se encontraba en crisis aquel preciso instante. 

Layla: ―Y el... ¿sigue en su cuarto?― 

Harry: ―No, salio, no tengo idea a donde haya ido, no quiso decirme...― dijo con inocencia y es que para entonces el rubio apenas tenia 6 años. 

Despues de un buen rato, el rubio finalmente se durmio despues de que su madre se hubiera quitado el maquillaje y le hubiera leido un cuento pero para entonces el padre no se encontraba en casa aun, algo de lo que logro enterarse el tio de Harry, Leonard Thompson. 

Leonard: ―Mi hermano aun no llega, sabes lo que eso significa. ¿Cierto?― dijo en cuanto Layla salio de la habitacion de Harry. 

Layla: ―No quiero hacer esto hoy, Leonard.― dijo para despues caminar como si nada pero fue entonces que Leonard le detuvo poniendole el brazo al frente. 

Leonard la miro de frente y casi de inmediato la empujo haciendola retroceder unos cuantos pasos, una vez hecho eso la llevo directo  a la otra habitacion, donde aparentemente dormian Layla y el padre de Harry, Adam. 

Leonard: arrincono a Layla logrando que ella ya no lograra hacer nada, en cuestion de fuerza Leonard tenia la ventaja. ― Nadie me dice que no. ¡¿Entendiste?!― acto seguido comenzo a desabrocharse el pantalon, el tenia intenciones de violarla y no era la primera vez que lo hacia. 

Para el dia siguiente, Layla se dedico a lo mismo, trato de superar lo de a noche y se dispuso a nuevamente colocarse el traje y maquillarse de payaso, aunque seguia teniendo en mente que en algun dia un trabajo mucho mejor le llegaria. 

Por la tarde, Layla rondaba por la calles, contando chistes a quien veia pasar desanimado y aunque lograba alegrarles el dia, Layla se sentia vacia por dentro pero al menos le sacaba una minima sonrisa el hecho de alegrar a los demas. Lamentablemente para ella, un par de adolescentes inmaduros trataron de hacerle una broma de mal gusto pues en el momento que ella habia descuidado su dinero debido a que se encontraba inflandole un globo a una niña, los chicos se acercaron para arrebatarle todo y una vez el dinero estando con ellos se echaron a correr lo mas rapido posible. 

Layla no se quedo con los brazos cruzados, necesitaba ese dinero sin importar que tanto era, si bien su familia estaba en crisis y no iba a dejar que ellos se lo llevaran, tal vez si dialogaba con ellos se lo devolverian, penso. Ella corrio durante varios segundos hasta que vio como ellos entraban a un callejon a lo que no dudo en seguirlos, para su mala suerte cuando llego ahi y volteaba a sus alrededores con la intencion de encontrarlos fue cuando uno de los adolescentes lanzo su puño contra el rostro de Layla provocando que esta cayera al suelo de inmediato.