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Yuu se fue al salón donde busco sus cosas para irse a casa , suplicaba el no toparse con Mikaela cualquier persona menos el . Pero por suerte no fue así , atravesó el portón de la salida y se fue a la parada de autobuses no espero mucho por el transporte subió y se sentó en un asiento.

Al llegar a su casa fue recibo por el Omega pareja de su papá suspiro pesadamente lo último que quería ver en el día era su cara — oh yuu ¿cómo te fue hoy?

— igual que siempre – respondió con sequedad

— traje galletas del supermercado quieres

— no – volvió a decir para subir a su habitación

— yuu – el azabache suspiro lleno de fastidio al escuchar la voz del albino menor quien al verle salió corriendo a abrazarle – cómo estás oye vamos a -

— ¡déjame en paz!– le gritó al niño de apenas cuatro años de edad – ¡no pienso jugar contigo!

El azabache de ojos verdes se metió en su habitación tirando la puerta con brusquedad frente al niño que se fue con su mami para llorar , no quería saber nada ni de ellos ni de nadie .




















Mikaela se reunió con sus amigos, había vuelto después de un largo viaje de vacaciones y las cosas cambiaban , fueron al karaoke pidieron bebidas y botanas y mientras sus chicas cantaban y se divertían ellos hablaban — ¿y bien te gusto nuestro nuevo juguete?– el Tepez miro al chico quien le hablo y dejo su bebida a un lado

— mm si , se podría decir

— es un Omega demasiado alzado – exclamó otro – hay que enseñarle su lugar

— ¿y como fue que dieron con el?– pregunto el rubio mirando a sus amigos

— oh mi yoichi nos lo dijo – exclamó otro chico de cabellos rosas y usaba lentes

— ¿yoichi?– el rubio miro al susodicho que estaba cantando muy tranquilo con las chicas que siempre le acompañaban

— si – dijo el mismo chico de antes– el nos dijo que en clase siempre le solía molestar y avergonzar por eso nos pidió que le diéramos una lección

Mikaela bufo después de todo si el se metía con unos de sus chicos lo pagaría caro sonrió un poco y miro al castaño — ey yoichi – le llamo obteniendo la atención de todos – ven aquí pequeño

— ya voy – exclamó contento el castaño quien se acercó a el rápidamente– ¿que pasa?

— los chicos me dicen que tú les pediste que molestaran a ese chico

— si Mika -kun , es que el es muy malo conmigo hoy estábamos hablando y me pegó en el brazo

— ¿por qué?

— el siempre le gusta molestar me Mika -kun solo quería que los chicos le enseñaran a no meterse conmigo

El rubio suspiro y acariciaba sus cabellos suavemente mirando al chico con lentes como le miraba atentamente — ya ese chico no se volverá a meter contigo te lo prometo – exclamó

— gracias Mika - kun – el Omega tiernamente le abrazo y el rubio le dejaba pues todos los Omegas que se le acercaban eran muy tiernos y cariñosos y eso le gustaba

— no te preocupes y si ese chico te vuelve a molestar dímelo yo mismo le daré una lección.

— lo prometo


























El pensó que podría con eso pero no, el abuso y acoso hacia el estaba escalando es más los demás dejaron de siquiera hablarle con miedo de que si se juntaban con el también pagarían . Le quitaban su almuerzo, le humillaban frente a todos , le dejaban encerrado en el salón incluso le golpeaban .

Mikaela disfrutaba todo lo que le hacían , no hacía nada para detenerles , tampoco esperaba que se metería en medio , el ya sabía que no sería fácil y por más que pedía ser cambiado de escuela su papá no quería . — yuu por fin llegas– el azabache había Sido encerrado en el baño y si no hubiera Sido gracias al guardia de seguridad se hubiera quedado allí toda la noche – ¿a dónde estabas?

— estaba con yoichi – dijo sin mirarle

— yuu tu papá llamo – el azabache le miro – dijo que vendría mañana

— ¿y cuánto tiempo se quedará?– el albino podía ver ese brillo tan lindo que poseían los ojos del azabache al hablar de su papá

— no lo sé yuu – suspiro – por eso intenta de llegar más temprano si , para que pasen tiempo juntos

— si está bien me iré a dormir buenas noches

— Hola yuu – el azabache miro al pequeño albino de ojos violetas se le acercó – ¿oye podemos jugar?

— si ven vamos a mi habitación

El niño sonrió y fue con su hermano mayor para jugar , el albino de ojos azules suspiro pesadamente al escuchar las risas de ambos , a veces deseaba que Guren su esposo y padre de esos niños no fuera tan indiferente con yuu no importaba como pasaron las cosas pero el era su hijo y el le necesitaba más que nadie pero este no parecía ver cuánto su hijo le necesitaba

🖤NUESTRO KARMA🖤Donde viven las historias. Descúbrelo ahora