Después de que Harry Potter ganara contra Voldemort en esa batalla en Howarts, el ministerio se dió cuenta que hubo demasiadas bajas en especial de Alfas y betas que fueron los que más pelearon en el frente mientras que los Omegas al estar en su may...
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|El lugar era precioso, espacioso y si, un poco gótico tal y como lo es el mayor pero eso no fue ningún problema para el menor.
Era un lunes por la mañana cuando Severus había recibido una carta del ministerio donde le pedían que informara el estatus de su emparejamiento, en otras palabras, que les dijera si el e Ivar ya vivían juntos y ya esperaban un cachorro, pues para el ministerio el sábado y domingo después de su liberación es tiempo suficiente para procrear un pequeño cachorro Alfa.
Por supuesto que Severus contestó con la verdad la cual es que su recidencia no estaba en un buen estado por lo que había dejado que su Omega volviera a su casa Muggle hasta que el arreglará todo aquí.
Cómo respuesta recibió un equipo de reacondicionamiento de elfos del ministerio que arreglaron, repararon, remodelaron y limpiaron su casa, sin tocar, usmear o dañar nada en su interior, todo echo con magia y un mensaje parlante.|
🔈- Apreciado profesor Snape, lamentamos ser taaannn, intrusivos, ¡Pero! Cómo usted comprenderá la ley de Despoblación es una emergencia y mientras más cachorros se creen ahora menos peligro correremos en el futuro. Sin más que comunicarle, le deseamos de parte del ministerio una feliz copulación.
SS- !!! ¿No quieren ponerlo en un bociferador?- *sonrrojo*
|Unos minutos después ya salía del estudio en el segundo piso una lechuza en tonos grises y azabache con carta en pico.
Mientras tanto el mayor decidió seguir con sus experimentos en su taller en el sótano, ahí tenía todo lo que necesitaba para crear su preciadas posiones.
No sabe cuánto tiempo exacto paso pero su estómago tenía cinco minutos gruñendo sin parar en clara protesta por la poca atención que le daba por ello decidió dejar reposar sus preparaciones y bajar a revisarlas más tarde preguntándose también si es que la lechuza se abra perdido en el camino al ser una zona Muggle adónde la mando.
Sin embargo todos estos pensamientos se evaporaron de su mente por dos sencillos motivos, uno al abrir la puerta del sótano para salir tiene acceso a una ventana y podía ver claramente como fuera de su casa todo estaba obscuro y dos su estómago rugió con más fuerza después de percibir el exquisito aroma que salía de su cosina a la cual se dirigió sin ningúna precaución pues recordaba bien ese aroma... Durante cinco años lo comió tanto como quiso en sus cumpleaños y también si se lo pedía a Ivar.
Y ahí, bajo la cálida luz de las velas con un estúpido delantal blanco con olanes que estaba seguro no le pertenecía envolviendo su cintura y callendo sobre sus piernas y su largo y suave cabello ahora castaño atado en una coleta alta y de espaldas con su casi completa atención en la estufa y su guisado, se encontraba Ivar.|
I- si me llama querida esposa lo alimentare de lo contrario valla deshabitando mi cosina, profesor Snape.
SS- está es mi casa, si alguien va a irse no soy yo, te lo aseguro.
I- Pero que cruel, está dispuesto a echarnos a la fría y desolada calle a mi y nuestro cachorro por un guisado, parásito parece que ahora estamos por nuestra cuenta, mamá va a protegerte pequeño parásito.
SS- Ivar no emos tenido sexo, aún no hay parásito en tu vientre.
I- ¿Está seguro?
SS- Mucho.
I- Mmm, no lo sé yo me siento muy embarazado...
SS- ¿Que estúpides estás diciendo ahora?
|Antes de que el menor pudiera contestarle, el mayor ya se encontraba a sus espaldas lo suficientemente cerca como para sentir su respiración sobre su nuca y como si estuviera hechizado deslizaba con gentileza sus fuertes manos por su cintura bajo el delantal, acariciando con un poco de fuerza la zona mientras recargaba su frente sobre su hombro.|
SS- tu ganas, ¿Terminarás pronto de hacer la cena querida esposa?-*deja un suave beso en el costado de su cuello*
I- yo... Si... Estará en un segundo/!!nyaa!!/ ¡No toque ahí!, ¡Pervertido!
SS- jajajaja, vamos, si no te apresuras tendré que tomar un aperitivo y no tienes ni idea de cuánto se me antoja un Omega a la mesa~
I- Ya-ya no es gracioso... Ya no frotes mas~~-*suspiro y jadeos*- ¡Haaa~!
SS- solo un poco-
¡Knock, knock, knock!
|Al sonar la puerta el hechizo se rompió y ambos sujetos en el interior estallaron en un sonrrojo, torpemente el mayor se disculpó y decidió darle un poco de espacio al menor para que se relajara mientras el abría la puerta.|
SS- ¿Que haces tu aquí?
X- ¡ahora resulta que no puedo venir!
SS- yo no dije eso... Pero si, es un mal momento, vete.
