𝐘𝐎𝐎𝐍𝐆𝐈 | 𝐓𝐚𝐞𝐆𝐢

III

"Puedes creerlo, nada me queda." chilló. Tae llevaba más de una hora mirándose al espejo de la habitación, dónde se reflejaba su cuerpo casi desnudo, mientras que su esposo estaba recostado en la cama, mirando televisión. "Engorde demasiado estás vacaciones." Yoongi no prestaba mucha atención a lo que decía el chico, pues no le interesaba si había engordado o no, amaba al castaño en todas sus formas posibles sin importar que, pero al parecer Taehyung no sentía lo mismo, siempre había luchado por tener un cuerpo "bonito", delgado y con curvas. "¿Estás escuchando?" Miró a Yoongi molesto, odiaba cuando su esposo no le prestaba atención.
"¿Eh?" El rubio miró sin entender que pasaba.

«oh, eres un tonto Yoongi-shi»

Los pensamientos de Taehyung estaban ardiendo.
¿Cómo no podía prestarle atención?

Era un tonto.

Sí, eso era. Un tonto que no le presta atención a su esposo gordo.

"¡Estoy gordo, Yoongi! Eso digo." Molesto y sin expresión más que de fastidio se volteo de nuevo al espejo, mirando cada parte de su "gordo" cuerpo.
Yoongi estaba confundido, quería reírse a carcajadas por su gritillo desesperado por algo que más que obvio no tenía ni una pisca, pero se contuvo, como el día que le pidió que fuera su novio. "Cariño, ¿Por qué dices eso?, Eres hermoso." Se levantó para abrazar el cuerpo cálido del mayor. "Pero-.." lo calló con un beso dulce en sus labios, el aroma tan fresco de Yoongi inundó las fosas nasales de Tae y se sintió eterno, que todo lo que estaba a su alrededor era eterno como ellos. "Te amo" dijo entre los labios del rubio. "Te amo aún más, y deja de culpar a tu cuerpo por amarse tal y como es. Solo amalo como él se ama."

No lo merecía.

No merecía a Yoongi, era precioso y repleto de perfección. Era afortunado por tenerlo a su lado.

Yoongi pensaba lo mismo.

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Quiero saber cada uno de tus gestos, saber cuándo algo te molesta o cuando esperas que te bese.
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Todo parecía perfecto. Mágico.

Taehyung parecía un ángel en la tierra, llevaba un lindo traje blanco y sus cabellos ligeramente peinados hacía atrás.
Había estado planeando por tanto tiempo este momento, era su primer año siendo esposos y estaba nervioso por resivir a Yoongi.
No faltaba casi nada para que llegara el rubio, salía de trabajar a las siete de la tarde y ya eran seis y cincuenta.
El castaño había preparado un gran estofado y la pasta favorita de su novio, había hecho su mayor esfuerzo, porque realmente quería impresionar a Yoon. No podía mentir había pedido un poco de ayuda a su madre, o más bien mucha. Normalmente el que cocinaba era Yoongi no él, pero en esta ocasión él lo haría por su amado esposo.

Y es que a veces el amor te hace hacer las cosas que jamás pensaste que harías, incluso una cosa tan simple como cocinarle o probar diferentes bebidas, infinidad de nuevas cosas, saliendo de tu zona de confort. Taehyung era introvertido y tímido con Yoon en ocasiones, siempre el rubio daba el primer paso para todo. Cuando le pido que fuera su novio, cuando se casaron, cuando se besaron, cuando tuvieron intimidad, cuando decidieron mudarse juntos.

Yoongi esto y el otro.

Pero hoy en especial Taehyung queria ser diferente, quería abalanzarse hacía una nueva experiencia como provocarle a su esposo aquella sensualidad que gritaba por salir desde hace mucho. Hoy sería el día.

La puerta se abrió y un hombre de cabellera rubia entro, arrastrando sus zapatos, para quitárselos y ponerse cómodo. "Cariño, ya llegué." No hubo respuesta. Tae estaba escondido en la cocina escuchando con atención los movimientos del chico. "¿Tae?" Nada. No había respuesta. Las luces se prendieron dejando a la vista, el cuerpo de su amado esposo, sus ondulados cabellos marrones se posaban sobre su frente y lo blanco de su vestimenta reflejaba la pureza en toda su extensión junto con su rostro sonrojado por la mirada profunda del hombre frente a él. Yoongi estaba inoptizado por su lindo novio. No podía moverse, incluso se le había olvidado que tenía que hablar.

"Yoon, ¿estás bien?"dijo Tae confundido por la expresión del menor. "Cómo puedes ser tan perfecto." Ahí estaba derretido por las palabras del rubio. Era tan sencillo para él poner nervioso a su esposo. Amaba eso.
"No digas eso" sonrió, sus pequeños pómulos se alzaron tiernamente y sus dientes se asomaron y eso mato a Yoongi. Beso sus labios y acarició suavemente cada curva de Taehyung.

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Al final, las almas gemelas se encuentran porque tienen el mismo escondite.

-Robert Brault.



Muchísimas gracias por leer!!

<3

Quise hacer esta historia porque creo que este ship casi no es el favorito. La verdad creo que todos los ships son muy lindos. <3
Así que espero les guste.

Cómo ven no tiene una trama segura, solo tratara sobre momentos sobre la vida de esta pareja de enamorados, de lo que viven, vivieron juntos y de diferentes etapas de sus vidas.

Sin más, gracias!!

Cuidense
mucho y
vivan la
vida al
máximo.

<3

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:D