"¿No tienes clases hoy?" Le preguntó Nayeon a Tzuyu.
"He terminado por hoy". Tzuyu sonrió.
Estaban en la sala.
"¡Traje el almuerzo!" Dijo Tzuyu emocionada. "Pasé por el lugar más cercano a tu apartamento". Tzuyu informó antes de dirigirse a la cocina de Nayeon.
Parecía cómoda estando en el apartamento de Nayeon.
"Espera, ¿pasaste por el lugar que vende el mejor pollo frito en este planeta?" Preguntó Nayeon.
"¿Te gusta ese lugar? ¡Genial entonces!" Tzuyu estaba feliz.
Ella no lo sabía, por supuesto, pero como estaba tomando un taxi en ese momento, ese era el único lugar donde podía pasar.
"¡OH DIOS MÍO!" Nayeon gritó de alegría cuando vio a Tzuyu abrir el recipiente de comida lleno de papas fritas y una caja llena de pollo con parmesano y miel. En ese momento estaba muy agradecida de que Mina no estuviera en la casa o de lo contrario no podría comerlo.
Tzuyu no pudo evitar sonreír al ver su invaluable reacción.
"¿Sabes cuánto te quiero ahora mismo?" Nayeon miró a Tzuyu con lágrimas de felicidad.
Tzuyu se rió entre dientes como respuesta.
Tzuyu fue al armario de su cocina y buscó un plato para que comieran las dos.
"Toma." Tzuyu le entregó un plato a Nayeon.
"Gracias." Nayeon sonrió ampliamente.
La última vez que comió pollo fue hace dos semanas y ese debe ser su nuevo récord del tiempo más largo que no ha comido pollo.
"Tienes que terminar todo esto ¿de acuerdo?" Dijo Tzuyu con una sonrisa.
"¡No es un problema!" Nayeon exclamó y luego tomó tres alitas de pollo y las puso en su plato.
"¿Cómo está tu pulgar? Papá dijo que estaba sangrando el otro día" Preguntó Tzuyu preocupada.
"Si. No sé por qué no deja de sangrar". Nayeon murmuró con un bocado de pollo.
"Hmm, entonces debes tener cuidado".
"Estaba teniendo cuidado". Nayeon respondió. "Las personas que me rodean no son lo suficientemente cuidadosas". Ella añadió.
"Solo sigue teniendo cuidado, ¿de acuerdo?" Tzuyu respondió suavemente. "De todos modos, ¿sigues trabajando en el banco?" Preguntó Tzuyu de repente.
"Tu hermana me despidió el otro día y luego me devolvió el trabajo. Al principio lo estaba contemplando, pero después de que me regalara un maldito Xbox One para mi cumpleaños, ¿cómo puedo negarme?" Nayeon le dijo a Tzuyu.
"Espera, ¿te dio un xbox?" Tzuyu no podía creer lo que estaba escuchando.
"¡Si! En serio, tu hermana es la mejor". Nayeon sonrió.
"Urgh, tan típico de ella". Tzuyu murmuró para sí misma muy lentamente. Sabía que cuando a su hermana le empezaba a gustar alguien; ella haría algo así. "Espera, ¿cuándo es tu cumpleaños?" Preguntó Tzuyu.
"Ayer." Nayeon comió su tercer pieza de pollo.
"Deberías haberme dicho Nayeon". Murmuró Tzuyu.
"Está bien. No soy importante." Dijo Nayeon.
"Tu lo eres para mí." Tzuyu sonrió.
"¿En verdad? Nadie me dice eso nunca. Bueno, excepto mi madre y, a veces, mi gerente ". Nayeon trató de recordar.
