Llamas de esperanza.

Capitulo 1: El imperio de Tokyo

Capítulo 1: El imperio de Tokyo

Las obras presentadas aquí para la creación de este fanfic son:

Fate Stay Night (フェイト／ステイナイト) y Fire force (En'en no Shōbōtai/ 炎炎ノ消防隊)

Y los personajes utilizados en esta no son de mi propiedad, sino de Kinoko Nasu [Fate Stay Night] y Atsushi Ohkubo. [Fire Force]

Apoyen al creador original.

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Takan! Takan! - Takan! Takan! - Takan! Takan!

—¡Oie!, ¡Jii-san!, ¡Otro más! — Platos y vasos rebotaron ante el estruendoso sonido del tren haciendo fricción contra las vías mientras hacía temblar el suelo a su paso, en su última parada del día. Pero aun con todo eso, el chef del pequeño local de comida no perdió la voz de su comensal pidiendo una nueva ración en su tazón.

—¡En ello! — Haciendo que los fideos en el gigante sarten wok saltasen para evitar que estos se quemaran y adhirieran a este, el olor de las chuletas siendo ahumadas desde el otro lado del pasillo que conformaba la pequeña pero larga cocina, el chef hizo todo el camino para sacar los ingredientes del ramen pedido.

El sonido metálico de las pinzas siendo retiradas del tubo de acero inoxidable de grado alimenticio fue precursor del rico olor de la carne siendo cocinada con humo a gran temperatura. Muchos de los consénsales ubicados en la barra, la única mesa del pequeño local, respiraron tal aroma que les hacía relajarse después de un agotador día de trabajo.

Con movimientos rápidos y precisos, el caldo a cocinado a base de algas y de setas llenó el tazón entregado seguido de los fideos dorados, la mitad de un huevo cocido hizo su camino junto con los fideos. A un lado de los fideos el pedazo de chuleta de cerdo ahumado hizo su paso hasta quedar dentro del caldo y para finalizar, una pequeña cantidad de apio y cebolleta para coronar el plato.

—Que lo disfrute. — Dijo el chef antes de volver para continuar cocinando y tener suficientes ingredientes preparados para hacer el platillo solicitado en el menor tiempo.

—¡Itadakimasu! — El asalariado no contuvo la sonrisa de tener tal placer de degustar perfecto platillo frente suyo, y con voraz hambre comenzó a sorber los fideos calientes que calentaban su alma.

Estirando su cuerpo cansado por una jornada laboral tan demandante como era la planta secundaria de la perpetua central térmica Amaterasu. Demasiado tiempo analizando dato le hacía sentir agotado, en especial por su jefe superior que le negó su buen aumento después de trabajar 20 años en la maldita central.

La única gracia salvadora que logró animarlo fue esa cena tan asombrosa que acababa de comer. Lo siento querida, pero parece que alguien más se coronó como el dueño de mi estómago. —En serio, muchas gracias por decirme de este lugar. Fue delicioso. —

—Te lo dijimos Komatsu. Este "Pasillo Gourmet" es lo mejor que encontraras de todo el Imperio de Tokyo. — Con su traje aun manchado por aceite, uno de los técnicos dijo disfrutando aun de lo cálido que se sentía su cuerpo después de un día de trabajo.

—Eso es verdad. Mi hijo a estado en Shinjuku un largo tiempo, y ningún otro "Pasillo Gourmet" supera al que tenemos aquí en Iriya. A pesar de que se fundó en shinjuku. — Otro comentó mientras acomodaba sus gafas en su lugar. Un supervisor dentro de la industria, pero fuera de ella antes de ser el jefe de área era el amigo de ambos hombres.