DISTANTE

Estamos Dañados...?

" El sol entraba por su ventana iluminando la habitación, se envolvió más  en las cobijas tapando su cuerpo, sintió el repentino tacto de dedos recorrer sus piernas acompañado de pequeños besos en su espalda, movió un poco su cuerpo para alejar al intruso.

— Fargan déjame dormir —dijo adormilado.

No recibió respuesta pero si un beso en los labios que se fue intensificando no puso resistencia ante eso por falta de energía, volvió a sentir las manos de su pareja acariciando sus piernas, la boca de Fargan paso a descender por su cuello dejando pequeños besos.

— Para, estoy enfermo te voy a contagiar — le  recordó a su pareja , poniendo su mano en su cabeza acariciando su cabello.

— No me importa — dijo Fargan para besar su pecho.

— No voy a poder cuidarme si tengo que curarte a ti también —volvió a decir cansado.

— En ese caso yo cuidare de ti y tú de mi así ambos estemos en cama — dijo dulcemente.

No supo que decir ante la lógica de su búho así que se dejó llevar por las caricias y el amor que le ofrecía.

Yo siempre te cuidare cuando te enfermes."

La repentina llegada a las islas fue algo que consumió su tiempo y mente alejándolo de las frecuentes pesadillas y pensamientos malos, su personalidad de líder nato le brindo una inexistente calma.

Era cierto que el viaje y la batalla se llevaron a varios compañeros pero más importante al amor de su vida "Luzu" claro que  no demostró sufrimiento o debilidad era un antiguo guerrero de karma, el líder de un pueblo y un soporte entre la oscuridad que pasaban todos, el tenía que soportar por todos pero ¿quién soportaria por el?.

Los primeros días ya venían con problemas como la perdida de memoria de Biyin pero supo utilizarlo para cubrir el hueco en su corazón, inventando una relación de años con la rubia  acompañado de un supuesto hijo que es Axozer quién afirmó la mentira pues siendo un niño solo busca una figura materna amorosa.
La falta de animales, cultivos y minerales lo ocuparon pues tener una familia y amigos que cuidar tenía responsabilidades, ser Auron tenía peso.

Pero a pesar de todo su mente lo torturaba repitiendo la despedida tan mala de su novio, los gritos, el olor a sangre, sus ojos lagrimeando por el dolor, la espada que se clavo en su estómago, el portal que se abrió bajo sus pies, sus llamados de ayuda y la oscuridad al desmayarse. Todo se repetía una y otra vez como un disco rayado, una historia inconclusa cómo siempre había sido toda su vida, no merecía seguir vivo y así el dolor se convirtió en ataques de ira matando animales, rompiendo objetos, gritándole a Biyin y Axo, alejando poco a poco esa puta mentira de familia feliz.

Era un Miércoles por la mañana habían pasado una semana desde su encierro, no comía mal, pero tampoco bien, su casa era un desastre pero poco le importaba.

Su estado era malo pero seguía consiente así que decidió salir a dar la vuelta alejado de todos, camino por varios metros hasta llegar al portal entrando a este yendo a la isla vecina, todo era tranquilo cosa que le resultó curiosa estaba tan acostumbrado que fueran tan ruidosos.

Siguió su camino viendo las construcciones de la gente hasta que llegó a la casa del cuervo, sus cultivos estaban secos por la falta de atención, la puerta estaba entre abierta así que entro viendo polvo y suciedad, la sombría cueva le dio la misma sensación de pena y tristeza que su casa, había olvidado que su amigo estaba en las mismas condiciones que el, solo, abandono por su pareja.  Siguió a tientas hasta la supuesta recámara de Focus estando en total oscuridad escucho el leve llanto del cuervo, poniendo una pequeña antorcha para alumbrar lo vio tirado entre sábanas y objetos filosos, estaba más delgado que el pero todo quedó en segundo plano al ver sus blancos brazos llenos de heridas profundas y finas pero la que lo asusto fue la única que brotaba sangre, con rapidez y cuidado tomo una de las sábanas rompiéndola en tiras para colocarla en la herida haciendo presión.

El llanto se intensificó a tal grado que el mismo entro en un limbo de pensamientos intrucivos de querer dañarle, ambos en su mundo de dolor observándose fijamente.

Quizás el daño que tenía los hacía iguales.

Tal vez un abrazo no venía mal en ese momento tal vez la compañía salvaría  la situación.

Auron se levantó y se acostó en la cama seguido por el otro ambos mirando a otro lado buscando calmarse siguiendo la respiración del otro.

Ambos  tan DAÑADOS.

Si tiene faltas de ortografía digan en los comentarios para hacer la corrección ya que solo lo leí por encima, gracias.