Bajo la mesa ✦ KookMin 국민

II.

2016

Las miradas seguían cada tanto.

Jungkook siempre tenía su completa atención.

Trataba siempre de no hacerlo, pues sabia que llegaba a ser algo incómodo para el menor, pues no tenía mucha experiencia en el departamento del amor, pero era casi imposible.

Su enamoramiento era inevitable.

Y Jimin era una persona que amaba demostrar lo que sentía. Sobre todo cuando hablaba de el cariño hacia alguien más.

Si sentía algo, el lo demostraba sin vergüenza alguna.

Muy contrario a Jungkook que siempre se guardaba sus pensamientos y sentimientos para el.

Además de que ahora era complicado acercársele, por lo que tenía que conformarse con mirarlo solamente.

Aunque había aprendido a ser un poco más disimulado que antes.

Los miembros del staff ya no alegaban de ello.

Pues le habían prohibido tener muchas interacciones con el maknae. Con la justificación de que "era muy obvio su enamoramiento"

Para su suerte y felicidad, el menor ya no actuaba igual que antes.

Jimin atribuía eso al crecimiento tanto físico como mental del menor. Pues ya no era un niño de 14 años, como lo había conocido.

Ahora faltaba poco para que cumpliera 18 y con ello, muchas cosas habían cambiado.

Como ahora mismo, que milagrosamente, el que estaba abrazando al contrario era Jungkook.

Muchos del staff e incluso los demás integrantes se habían sorprendido por ello. Y el mismo Jimin también.

No era algo que ocurriera todos los días.

Pero le gustaba eso.

Y su gran sonrisa era la prueba de ello.

[🕰]

En medio de la noche, sus ojos se abrieron por el ruido que había en su habitación.

En la cama, al lado de la suya, estaba Hoseok, durmiendo completamente, por lo que se extrañó.

Hoseok siempre era tranquilo al dormir y no era el que estaba haciendo ruido.

Compartir cuarto por varios años hacia que se conocieran a la perfección.

Parpadeando varias veces, pudo ver una sombra en la puerta.

Era Jungkook, que había, al parecer entrado a su habitación.

Eso lo descolocó. ¿Qué hacia el menor allí?

Este se acercó a su cama, y el parpadeo varias veces creyendo que era un sueño.

Pero cuando tuvo a Jungkook enfrente suyo, supo que era real.

Las respiración y el calor que transmitía el menor era muy real.

— Hyung, ¿Puedo dormir contigo?— La palabra hyung lo extraño aún más, pero la voz baja de Jungkook era tan relajante.

Se notaba que no quería despertar a Hoseok.

Jimin asintió lentamente y el menor se subió a la cama, quedando pegado a la pared.

Abrazando al mayor por la espalda.

Esa noche, Jimin durmió mejor que nunca.