Capítulo 4

23 3 6
                                    


No podía entrar tan fácil como ayer, tenía que esperar. Me encontraba en casi lo último de la fila, habían muchas chicas en el lugar, no veía tantos chicos solo, dos o tres, el tiempo seguía avanzando y era como si nada, no me había movido de mi sitio ni un solo centímetro, ya me estaba aburriendo, no les eh dicho que me aburro con facilidad, pues si. Estaba sola en ese lugar, no conocía a nadie, debo resaltar que si conozco al grupo pero, no puedo decir que nos hicimos amigos en tan solo un día.

Ya se estaba haciendo tarde y mañana tenía que seguir con el proyecto ya me van quedando pocos días, tenía dos opciones, o me iba o me quedaba y averiguaba ¿como llegue a casa?

Un chico con antifaz sale a fumar un cigarrillo y lo reconozco es el baterista, trato de que me vea y lo logro, eh dicho que soy buena en lo que hago ¿no? pues...

-hola-lo saludo y él trata de acordarse quién soy

-ah tú eres la chica del otro día en la zona VIP, la que no paraba de hacer preguntas- no es como si me respondieran tan fácilmente

-si, esa misma

-y ¿por que no entras?- acaso está ciego, no ve la grandísima fila

-no es como si fuera una famosa que llega a un lugar y le abren el camino de par en par- hablé sarcásticamente

-bueno, es verdad, no eres ni una princesa ni nada por el estilo- rió, se cree muy gracioso- pero, puedes entrar conmigo

-en serio, ¿no seria un problema para ti?

-para nada.

Entramos por la puerta de atrás, en cuanto entramos, esto no era como yo lo recordaba, las luces que iluminaban el lugar eran de un color morado con rosado, algo no estaba bien en este lugar, la banda ni estaba tocando, y cuando me fijé bien, todos los que atendían el lugar eran chicos, tantos meseros como el batman, enseguida el guitarrista desapareció de mi vista y eso me preocupaba, comencé a buscar a algunos de ellos pero era un poco difícil ya que todos en ese lugar usaban antifaces hoy.

¿Qué ocurría?

-señoritas y ahora lo que más estaban esperando- dijo alguien por el micrófono, aunque no lo veía-nuestros más talentosos strippers- comooo... escuché bien STRIPPERS, ese lugar era un bar de strippers. Me quedé con la boca abierta literalmente, si alguien se llega a enterar de que estoy aquí mi reputación va a caer en picado.

Comenzó a sonar una música muy...muy no se que decir, vamos que de solo escucharla podías mover todo el cuerpo, en el escenario aparecieron tres chicos, en solo pantalones y con antifaces. Ellos bailaban de una manera... sexy, si muy sexy, moviendo sus cinturas al compás de la música, esto era de locos, nunca me imaginé estar en un lugar como ese, entonces este bar al parecer cambiaba de tema todos los días o ¿que?

Me dirigí al baño a echarme agua en la cara y recapitular la situación, me encontraba sola, rodeada de chicos candentes, muy sexys, que su trabajo es satisfacer los deseos de las chica, no quiero imaginar cuando mi amiga se entere de esto, ¿se alegrará o me regañará? pues después lo pensaba, estoy escasa de tiempo y no veo al grupo, ¿en donde se metieron?

Al salir de los baños escucho unos ruidos, o más bien gemidos que vienen de atrás de unas cortinas o mejor dicho la zona VIP donde había estado, parece que ya estaban haciendo su trabajo, y por lo que oigo de la chica muy bien que lo hacen, pero ahora no, no Kath sigue tú camino, tú no oíste nada. Pero en el momento que me decido ir a la barra aparece el ser que estaba en esa zona y nada más y nada menos que el pianista, ya entiendo porque la chica gritaba como una loca.

-Hey-le miro con ¿curiosidad? no

-Ah eres tú, mi cantante favorita- eso último me lo dice en el oído

-no soy cantante- lo miró fijo a los ojos, tienes unos ojos verdes manzana, cualquier chica caería ante ellos, digo cualquiera hasta yo

-pues para mi eres la voz más bonita que eh escuchado- ¿me debería sentir halagada?

-Ah..si  que hay de su vocalista, además ya dejemos el tema no soy cantante y no vine por eso

-Él es él, no tengo otro modo de decirlo, y ¿que haces aquí?

-Quería hablar con ustedes, por como llegué a casa ayer- el se quitó el antifaz y se sentó al lado mío

-Umm buena pregunta

-¿Cómo que buena pregunta? que pasó ayer después de que yo cantara, trato de recordar, pero... nada

-Te recuerdo que yo también estaba tan ebrio como tú- es verdad de eso me acuerdo, tanto el baterista como el pianista como el guitarrista estaban igual que yo, entonces al único que le puedo preguntar es al vocalista y ¿por que rayos no les eh preguntado sus nombres? deben pensar que soy un bicho raro que los llama por sus profesiones.

-Ahora estaba pensando, nunca me dijeron sus nombres- el chico pidió un vodka y yo hice lo mismo, solo una bebida y ya, tenía seca la garganta

-Nunca preguntaste

-Bueno ahora estoy preguntando, ¿como se llaman?

-Yo me llamo Yosh Citer y el guitarrista es mi hermano, Audin Citer, el baterista es Trent Forets y...- no pudo terminar porque de repente aparecieron los mencionados

-Hermanito que haces, ¿tu eres?

-soy Kath

-ah si la cantante- ni otra vez

-no soy cantante

- lo que tu digas

-¿de que estaban hablando?- pregunta Trent

-nada importante, solo le estaba presentando nuestros nombres- si lo que te faltó uno

-Bueno entonces ya debes saber que soy Audin hermanito de este pequeñín- Yosh lo fulmina con la mirada- queee.. soy tu hermano mayor- pues yo pensé que Yosh era el más grande.

- si lo sé, y tú eres Trent, gracias por lo de antes

-no hay de que

Los chicos comenzaron a beber, y yo me contuve, ¿donde estaba el vocalista?, que aún no me dicen su maldito nombre. Ellos de verdad no estaban para nada mal, pero no eran mi tipo, aunque si mi amiga los ve de segura los coge a los tres, no se si se me entiende. Lila es extrovertida, le encanta innovar, no va hacer cosa nueva para mí, pero aún así la quiero con locura.

Ellos estaban sin los antifaces, ni se para que lo usan, y mis preguntas, bueno nunca pude hacerlas, ¿por que usan eso? ¿por que este lugar ahora era así? ¿como llegué a mi casa? y ¿cual es el nombre del vocalista? Mis preguntas me atormentaban, no paraban de venir una tras otra, era como un mar, cada ola que llegaba a la arena venía con una pregunta y sin repuesta.

Dejo a los chicos, tomo mis cosas y me voy, deben ser como las doce de la noche y yo aún despierta. Pero antes de irme paso de nuevo por el baño y escucho esta vez unas voces

-oye, cuando se lo vas a decir

-el que

-tú sabes, no eres tonto, eso lo tengo asegurado de muchas maneras, estoy segura que está empezando a sospechar

-eso no tiene nada que ver contigo

-soy tú amigo y me preocupo por ti- parece que discutían de algo, no sabía el que, pero una voz se me hacía familiar, era la del vocalista, ese chico no puede ser más extraño

Las voces se detienen y sale el que supongo que es el amigo, luego salgo yo, como si nada, pero choco con él, esto no puede estar pasando

De tantos lugares que tiene la tierra, vienes al lugar que yo prefiero estar, como una brújula en busca de su norte, como si este se fuera a perder, en los tantos baches que tiene la vida.

Love & HateDonde viven las historias. Descúbrelo ahora