Soy mi propia luz.

4 Cap. -Te amo papá.

-Dime Emma que fue lo que acordamos, nada de este tipo de problemas de nuevo ¡¡Por poco me despiden!! -Grita mi mamá levantándose del mueble y no a sido la primera vez que lo hace. Ha repetido esa frase del despido más de 4 veces y eso hace que me desquicie, no hace más que cuestionarme y escoje un momento para entenderme, ya le pedí disculpas por haber hecho lo que hice y aun así le vale mis disculpas, sigue dándome lata y estoy harta de escuchar esta mierda, le daré fin a esto antes que termine diciendo algo peor.

-Puedes dejar de repetir esa jodida frase ya se que por poco te despiden QUEDO CLARO, lo arregle, me disculpe y todos lo aceptaron excepto tu, como es tan usual... Ahora dime si no habíamos acordado no contarle ese pasado a nadie.. Joder Ana son mis problemas, mis secretos y tu no tienes nada que hacer diciéndoselo a terceros...-Digo enfadada y ella poco a poco se va colocando más roja de la rabia pero se encoje de brazos cuando recuerda que me prometió no hablar de eso con nadie más.- Es que ni a mis amigos les EH contado ese pasado, Lisa todavía no sabe nada... Carla es ignorante del origen de mis problemas y ahora la esposa del jefe de mi mamá lo sabe con puntos y señales. Olvidalo ya no quiero seguir escuchandote siempre vives cuestionandome y nunca me entiendes.

Sin esperar respuesta alguna me paro a paso firme del mueble y me dirijo a las escaleras.
-Emma vuelve aquí, tu y yo no hemos terminado de hablar. -Me grita por detrás de mi con un tono de indignación.

-Tu, porque yo ya no tengo más nada que decir...-Subo molesta, escuchando los llamados llenos de rabia de mi mamá. Tomo mi cabeza entre mis manos para obligarme a no llorar. Odio que haga eso, que se viva quejando, que no acepte mis errores aun así yo ya los hubiera aceptado y los demás también ¿Porque siempre tiene que ser tan cabeza dura esa mujer? Siempre a sido así, mis amigas a veces me dicen que quisieran tener una mamá tierna y divertida como lo es la mía pero es porque no conocen su lado real, ese que solo esta casa conoce, ese que solo yo lidió... Sigo subiendo los escalones a golpes como si ellos tuvieran la culpa y ya cuando estoy en el último, choque con su suave camisa mangas larga azul y al alzar la mirada me encuentro con los ojos llenos de comprensión de mi padre, este hombre siempre esta aquí para comprenderme cuando mi mamá se vuelve dura conmigo... Este hombre que con solo sus abrazos te hace sentir amada y llena de paz.

-Cariño, quieres dar un paseo con este viejo antes de ir a dormir.

-Papá, decir que tu estas viejo es un delito.- Y es verdad él todavía puede conquistar a mil mujeres si lo desea y no es que no las tengan. Quien no querría estar con un hombre rico, reconocido, elegante, galán, comprensivo y que tras de todo eso se mantiene en forma, sigo preguntándome como reparte su tiempo para hacer tantas cosas, trabaja, salir con nosotras, hacer ejercicio y mantiener el orden de todos los problemas que se presentan en la oficina... Sin meter las reuniones y muchas cosas más... Este hombre es mi héroe y mi ejemplo a seguir, no es que mi mamá no lo sea, de hecho también lo es, pero quiera o no lo quiera mi papá tiene mas agite que ella y a pesar de su trabajo asxficiante nunca nos a faltado, ni porque este en una reunión al otro lado del país... Se ríe ligeramente ante mi comentario y mi alza para luego cargarme como una bebe, a pesar de que ya tengo 16 casi 17 el me sigue tratando como un bebe hasta el punto de que a veces cuando me quedo dormida en el sofá por ver TV hasta tarde, me carga y me lleva hasta mi cuarto y vaya que si les digo eso a Carla y a Lisa me tomaran como burla. Sonrió en su nuca mientras entrelazó mis brazos en su cuello.

-Wao! Cuando venga a ver ya ni podre alzarte, estas un poquito más pesada ahora, andas comiendo mucho ehh.

-¡¡PAPÁ!! .-Le digo sonrojada por la vergüenza y el se ríe a carcajadas, me baja gentilmente y luego me da un fuerte abrazo.

-Vamos, si tu madre sale de la cas a nosotros también tenemos derecho de hacerlo.- Me dice alentandome para bajar.

-Esta vez manejo yo.-Digo cojiendo el bolso y rebuscando las llaves de mi auto pero mi papá me detiene.