Mi destino

Vamos a jugar

Terminé de ayudar a mi madre por fin después de una hora

-Cariño, no te preocupes llamaré a seguridad e instalaremos cámaras de seguridad por toda la casa

-Esta bien mamá

-¿Sabes quien pudo ser?

-Creo que si mamá, pero tengo que estar segura si no no puedo hacer nada

-Si necesitas ayuda para lo que sea me lo dices ¿vale?

-Creeme que lo se, muchas gracias. Me voy a ver a las chicas

-Esta bien cariño no tardes en venir

-Siii mama

Llamé a Marina y a Valeria y las cité en el parque mas cercano y les conté todo y mi idea por llamada

-Bueno chicas, manos a la obra

-¿Por donde quieres que empecemos a investigar?

-Valeria, tu encargate de averiguar si puedes sacar algo de sus redes sociales o de alguien que el conozca. Marina, tu pregunta a conocidos tuyos si conocen a alguien con algún antecedente

-¿Y eso de que va a servir?

-Este lugar es muy pequeño y básicamente sabemos todos la vida de todos, así que si hay alguien con algún  antiguo cargo de seguro que tiene que ver con el por que si no mal recordais pillaron a uno hace tiempo con su mismo aspecto por este mismo caso de hecho

-Es verdad se me había olvidado 

-Marina eso son cosas que se tienen que saber

-Oye un respeto eh que algunas no son tan chismosas como otras

-¿Chismosa yo?

-Heeeey chicas no se distraigan. Venga empecemos, si saben algo me avisan. Hasta mañana

-Adios — dijeron ambas

Al día siguiente me levanté mas temprano de lo habitual y llegué temprano a clase cosa que a mi madre se extrañó. Al entrar en clase busqué a Mateo como loca pero no vino a las dos primeras horas

-Vengaaaa suena yaaaa

-Marina callate ya

-Dejame en paz Valeria que no he dormido

-Queda un minuto para que suene no me seas pesada

-Ash

En ese momento sonó el timbre

-Venga niña ya puedes salir

-Oleeee

-Chicas yo os espero donde siempre vamos, ya sabéis a donde voy

-¿No quieres que vayamos contigo?

-No hace falta, no tardaré

Y de esta manera fue como me dirigí a buscar a Mateo, mi sospechoso numero uno, pero aunque lo intentase buscar no lo encontraba en ninguna de las clases. Sin exito alguno fui al baño antes de ir con las chicas y lo encontré alli, metiendose al de los chicos, así que decidí esperarle en la puerta

-Mierda que susto ¿que haces aquí?

-Vengo a que me expliques

-No tengo tiempo para esto

Empieza a irse

-¿Quieres que todos sepan tu secretito?

Mateo se paró en seco y se giró hacia mi de una forma espeluznante