Pretty Eyes

#9

Ya han pasado 10 años, era el aniversario de Tartaglia y Scaramouche, el pelirrojo le tendría una enorme sorpresa a su amado.

Tartaglia citó a Scaramouche en un muy lujoso restaurante y cuando el pelimorado llegó se sorprendió demasiado, se sentaron a la mesa y comenzaron a conversar.

–. wow Tartaglia.. cada día me sorprendes más...

–. lo que sea por mi chico con los ojos más preciosos

Scaramouche se sonrojo e intentó ocultar su rostro pero era inútil, el contrario solamente se burlaba de la situación.

Pidieron su comida y comieron hasta casi no poder más, fue cuando Tartaglia dio dos aplausos en el aire y las luces se apagaron, a excepción de una luz que los iluminaba a ellos y algunas luces pequeñas que adornaban el lugar.

–. Raiden Scaramouche, hoy cumplimos 10 años de noviazgo, hoy hace 10 años, comenzó esta mágica historia de amor, admito que muchas veces estuve aterrado en pensar que algún día ello terminaría, pero no fue así, el día de hoy, quiero comenzar otra historia a tu lado así que... Raiden Scaramouche.. ¿te casarías conmigo?..

Tartaglia saco un anillo y se arrodilló frente al de cabello morado, al cual los ojos le brillaban como si fueran dos estrellas, todos los miraban, en silencio esperando la respuesta de aquel.

–. ¡si Tartaglia! ¡acepto!

Tartaglia y Scaramouche se levantaron y el pelinaranja fueron hasta la pista de baile, aun con las luces apagadas y una única luz iluminandolos, mostrando que ellos eran los protagonistas de ese dia, una vez en la pista de baile, comenzó a sonar una melodía de un piano y un violín, ambos comenzaron a bailar, mirándose fijamente a los ojos del otro, nuevamente deseando que ese momento nunca terminara. Fue una noche maravillosa para la pareja, toda la gente ahí reunida les aplaudió con mucho entusiasmo.

Ambos decidieron que su boda fuera el próximo año, el mismo día de su aniversario y así esperaron, mientras pasaban los meses planeando todo para que ese día fuera perfecto.

Finalmente llegó aquel tan esperado día, ambos vistiendo de blanco, Ei, la madre de Scaramouche más que feliz por que su hijo se casaba con un joven que lo cuidarla y lo amaría por siempre.

Luego de la boda, comenzaba su vida de casados, había terminado su noviazgo y comenzaba su matrimonio. Queriendo estar al lado del otro para siempre.

Scaramouche se dio cuenta de que definitivamente su larga espera había válido la pena, incluso mucho más de lo que pensó y estaba feliz con aquello, tenía a su lado a un chico con un cabello súper suave y los ojos más preciosos que había visto en toda su vida, simplemente no podía pedir más ni quejarse, era feliz con lo que tenía.

Tartaglia por el otro lado, también era feliz, después de lo que habían pasado, las peleas y los malentendidos, todo había válido completamente la pena, ambos eran felices.

–. te amo Scaramouche.. amo cada parte de ti, sobretodo esos bellos ojos morados que hicieron que me enamorara perdidamente de ti, son los más bellos que he visto...

–. lo mismo digo... ese azul intenso en ellos tienen algo que me atrapa cada vez que los veo y son los únicos que quiero ver el resto de mi vida... te amo Tartaglia...

Ambos se abrazaron, en el mismo parque en donde su relación había comenzado...

Fin..

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