Serendipia | Hyunin - Stray Kids

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Terminó de escribir la última palabra en el pequeño cuaderno y lo cerró rápido, justo cuando sintió que alguien se acercaba por detrás y lo apretaba en un abrazo.

—¿Qué tanto haces? El camión de la mudanza está esperando abajo.

—Lo sé, lo sé. Sólo... Estaba respirando.

Hyunjin lo soltó y le dió la vuelta con delicadeza, mirándolo a los ojos.

—¿Estás bien, Innie? —preguntó con una mueca preocupada—. Si quieres quedarte sólo tienes que decirlo.

—¿Estás demente? ¿Y perder la solicitud de trabajo? No lo creo.

—Pero... El lugar está a cinco horas de aquí. Sé que extrañarás a tus padres.

—Hyunjin, hace años que no vivo con mis padres. ¿De qué hablas?

—¡De acuerdo, lo admito! —exclamó—. Creo que aquí el preocupado soy yo.

Jeongin soltó una risita y asintió, tomando el cuaderno de la mesa y metiéndolo en una de las cajas de mudanza.

—¿Y eso qué es?

—Nada.

—¡Vamos, dime! Te vi escribiendo algo cuando llegué.

Jeongin suspiró y sonrió, cerró la caja y se levantó para mirar a Hyunjin.

—Es un cuaderno que usaba para anotar lo que pasaba en mi día a día. Antes y después de conocerte.

—Wow... ¿Puedo leerlo?

—No.

—¡Por favor!

—Es privado —murmuró acercándose y dejando un suave beso sobre sus labios. Hyunjin lo rodeó con sus brazos y se lo devolvió—. Chismoso.

—Entonces está bien. Lo entiendo.

—Además, ya no necesito un cuaderno. Ahora tengo a alguien a quien puedo confiarle cualquier cosa.

—¿Y ese quién es? ¿Es más alto que yo?

—No lo creo. Como de tu altura.

—¿Entonces... Pinta mejor que yo?

—Para mi, nadie pinta mejor que tú.

—¿Es más...-

—Ya cierra la boca —rió volviendo a besarlo. Hyunjin soltó una carcajada—. Ahora, vámonos. Tenemos una casa esperándonos.

—Andando, cariño —dijo Hyunjin entrelazando sus manos—. Vayamos a seguir siendo felices.

—¿Una vida entera?

—La vida entera.

. . .

Fin. <8