¿Este es el final feliz que querías? (Tokyo RevengersxHazbinHotel)

Capítulo 9.5.- El emperador de Sanzu

El día que Takemichi asesinó a varios chicos de otra pandilla Sanzu lo presenció todo, pero en lugar de sentir miedo por ver a un Demonio observando cómo Takemichi asesinaba, sintió una gran satisfacción y un gran extasis.

- Wow, sabía que este chico era fuerte pero no sabía que fuera un psicópata -dijo extasiado-.

Después de que Takemichi terminara su matanza Alastor lo durmió pues sabía que después de eso él querría más y más, pero no era momento de que el se volviera un asesino a sangre fría.

Mientras Alastor lo llevaba cargando hasta su casa, Sanzu lo siguió, pero seguro pensaran qué tal vez Alastor no sintió la presencia de Sanzu, pues se equivocan, Alastor quería que Sanzu lo siguiera.

Cuando Alastor llegó a la casa dejó a Takemichi recostado en su cama y se puso a preparar algo para comer.

- Se nota que estas de buen humor -dijo curioso-.
- Por supuesto que estoy de muy buen humor -dijo animado-.
- ¿Por? -preguntó curioso-.
- Porque Takemichi acaba de asesinar a varios pandilleros el solo -dijo con una sonrisa tétrica-.
- Ah... -dijo preocupado-.

Alastor preparó carpaccio de carne humana y Reab Eyes termino medio con patatas al vapor con mantequilla y especias, al poco rato de que Alastor había terminado de cocinar, Takemichi se despertó y bajo pues el olor de la carne cocinada le llamó mucho la atención.

- Veo que ya despertó su majestad -dijo burlón-.
- Muy gracioso Angel -dijo sarcásticamente-.
- Oye Takemichi te molesta si invitamos a tu compañero pandillero -dijo señalando la ventana-.

Takemichi volteó a ver a la ventana y vio a Sanzu quién se asusto al ver a que Takemichi lo había descubierto, Takemichi salió a ver a Sanzu y lo invitó a comer como si nada.

Cuando entraron a la casa, Angel Dust les sirvió sus platos de comida y puso el carpaccio con pan de ajo con especias en medio de la mesa para que todos comieran, Sanzu estaba sorprendido por la calidad de la comida, pues parecía hecha por un chef profesional.

- Es impresionante que tengas demonios a tu merced -dijo maravillado-.
- ¿A mi merced? -preguntó curioso-.
- Seguimos a nuestro amo Takemichi porque tiene mucho potencial par ser nuestro amo -dijo con una sonrisa-.
- <<¿Qué demonios dice?>> -pensó intrigado-.
- Eso es tan maravilloso -dijo extasiado-.
- Me permites hablar con mis demonios -dijo tranquilo-.
- Si, por supuesto mi emperador -dijo extasiado-.

Takemichi fue a la sala con Alastor y Angel Dust pues quería una explicación sobre lo que Alastor estaba diciendo.

- ¿Desde cuando son mis subordinados? -preguntó en voz baja-.
- Solo estamos fingiendo, pues ese chico te vio matar a esos pandilleros -dijo en voz baja con una pequeña sonrisa-.
- ¿El me vio matar? -preguntó-.
- Si, y me siguió cuando te traje a la casa inconsciente -dijo tranquilo-.
- Entonces hay que fingir que somos los subordinados de Takemichi -dijo desconcertado-.
- Si queremos que Sanzu este del lado de Takemichi, sería lo mejor -dijo animado-.
- Bien... -dijo disgustado-.
- Está bien... -dijo desconfiando de que el plan funcione-.

Una vez regresaron al comedor con Sanzu este estaba maravillado con el poder de Takemichi.

- Si no es mucha molestia mi emperador ¿de que es la carne? -preguntó curioso-.
- Es carne humana -dijo volviendo sus ojos azules, rojo carmesí-.
- ¿Carne humana? -preguntó curioso-.
- Si, Alastor atrapa a los mejores humanos y luego los cocina en diferentes platillos -dijo con una pequeña sonrisa-.
- Nunca había comido carne humana antes -dijo curioso-.
- ¿Por qué no te quitas el cubre bocas y comes? -preguntó-.
- No podría -dijo desviando la mirada-.
- Venga, quítate el cubre bocas y come, insisto, después de todo soy tu emperador ¿no? -dijo con una pequeña sonrisa-.
- Está bien... -dijo para después quitarse el cubre bocas-.
- <<Sinceramente Sanzu nunca me importó, pues nunca tuvimos comunicación>> -pensó serio- ¿quien te hizo eso? -preguntó-.
- Fue Mikey... -dijo desanimado-.