Amor Comprado [KaiSoo-ChanSoo]

Capítulo 2: Los Do

—Esperate Yeol—susurró KyungSoo entre besos— Puede que alguien nos vea.

Después de una gran sesión de besos, ChanYeol tenía ganas de más. —¿Cómo quieres que me separe de ti? Si te amo tanto... —siguió propiciandole tiernos picos en los labios.

—No podemos arriesgarnos a que nos descubran— KyungSoo se giro, dejando su espalda en el pecho del más alto, mientras el otro abrazaba su cintura— No hasta que hables con mi papá.

ChanYeol rió, con cierto tono amargo en su voz. —¿Le has hablado de mi?

—No.

—¿Por lo menos ya le dijiste que no te vas a casar con el tipo ese?— cuestionó el más alto.

—No he tenido oportunidad de decírselo, pero cuando la tenga lo haré.

Quedaron en un silencio algo incómodo. Las únicas que hablaban eran las olas del mar, que daban un espectáculo algo ruidoso, debido a que había subido la marea. Siempre evitaban hablar de ese tema, ya que siempre terminaba en un tenso silencio. Un tenso, incómodo y fuerte silencio.

ChanYeol era un simple marino, mientras KyungSoo era parte de una de las familias más pudientes de Busán. Hijo de un almirante -un alto cargo en la marina- y de una mujer decendiente de una famosa familia coreano-francesa de clase alta. Había muchas posibilidades de que la familia Do no lo aceptase como pareja de su hijo menor, por su clase social y porque su madre lo sobreprotegía por ser un portador. ¿No es increíble? Un hombre que puede crear vida en su propio vientre.

—Pero estoy seguro que mi padre entenderá, mi vida —KyungSoo decidió romper el hielo esta vez, volteandose hacia su novio— Y media vez hables con él, y le digas que me quieres, te aseguro que estará feliz de entregarme en el altar contigo.

ChanYeol sonrió, mientras se acercaba lentamente a KyungSoo. —Conste, ¿eh?

La cercanía de sus cuerpos les invitó a besarse una vez más, pero esta vez lentamente. La pasión ardía como el sol en la playa y el amor se sentía a flor de piel. KyungSoo nunca estuvo tan enamorado como ahora. Por fin pudo encontrar al indicado para compartir su vida y su tiempo, sus tristezas y sus alegrías. Se encontraba de frente con el amor de su vida, y próximamente, su futuro esposo.

—¿¡KyungSoo!?

Una conocida voz interrumpió el momento romántico de la pareja. MinHo se encontraba terriblemente confundido ante la escena que tenía en frente. ¿Por qué? ¿KyungSoo no era capaz de esperarlo? ¿En serio tenía que engañarlo?

KyungSoo logró safarse de los brazos de ChanYeol mientras corría hacia MinHo. —¡Traté de comunicarme contigo por todos los medios! Sin embargo nunca pude dar con tu paradero, MinHo. Incluso traté de localizarte en Londres, pero no te encontré.

MinHo apartó la mirada, incrédulo. —Pensé que querías que me regresara más rápido, pero nunca pensé que era para esto...

—¿Para decirte que me enamoré de otro hombre? —KyungSoo volteó hacia ChanYeol— Tenía diecinueve años, MinHo... y me dejaste solo por lo menos tres años. Creo que confundí el cariño con el amor... y mi madre me ahorilló a decirte que si. —su corazón comenzaba a acelerarse cada vez más— Sin embargo, nunca he estado enamorado de ti, MinHo...

—Veo que los únicos interesados en que nos casemos son nuestras familias —las palabras del mayor estaban llenas de veneno y rabia— Pero ya veo que no vales la pena, KyungSoo.

Las lágrimas comenzaban a inundar los ojos del mayor, mientras trataba de buscar la mano izquierda de su ex prometido, en busca de aquel anillo de compromiso que le dio años atrás. Sin embargo, no estaba.