Nos vemos allá arriba

Capítulo 5: Confiésate!

Habían pasado 2 semanas desde que Tae le confesó a Boby que le gustaba Daniela, no dejaba de darle vueltas al hecho de que su mejor amigo estaba muy interesado en la morena, este desconocía la gravedad de la chica, la cual no tenía mucho tiempo para disfrutar de un "Noviazgo" largo, así que animó a su amigo a que se lanzara en la conquista de la muchacha lo mas rápido que podía, estaba más que claro que intentar desanimar a Tae era una perdida de tiempo y no tenía el valor suficiente para contarle la verdad, así que sólo le quedaba un camino, hacer que su querida Mariane lo ayude en su descabellado plan.

- Y... cuándo piensas confesarle tus sentimientos a Dany? - preguntó el rubio mientras intentaba armar el rompecabezas mental que había dibujado en su imaginación para lograr unir a la parejita.

- La verdad... no sé, tengo un poco de miedo en que me rechace y perderla como amiga... que tal si se asusta o no le gusto?; sabes, almenos así estoy cerca de ella.

-Pero que dices amigo, ahora el que está siendo un tonto eres Tú, por lo que me cuentas y lo que he observado no le eres indiferente, Mariane me ha "insinuado" que al parecer esta niña también siente "maripositas" por ti - haciendo comillas con los dedos.

Los ojos de Tae se iluminaron al oír aquella noticia; si era verdad que la chica también gustaba de El, no habría problema alguno; por la mente de Tae se dibujó la imagen de Ella y El tomados de la mano, paseando por un parque, mirándose a los ojos y sonriéndose mutuamente y después... pidiéndole pasar el resto de sus vidas juntos, era la chica perfecta para el castaño.

- Eh!... Tae!, en qué piensas? - El rubio sacó de su burbuja de ensoñación a su mejor amigo volviéndolo a la realidad.

- En nada en especial - una sonrisa se había quedado impregnada en el rostro de Tae -sólo... pensaba en cómo podría pedirle que sea mi novia y cual sería el lugar ideal, eso es todo.

El rubio desvió su mirada hacia el techo de la habitación, mientras pensaba en cual sería el mejor lugar para que los tortolitos pudieran declarar su amor sin ser descubiertos. De pronto una loca idea que parecía efectiva se asomó por su cabeza.

- Lo tengo! - gritó con entusiasmo como si acabara de descubrir un nuevo planeta, haciendo que Tae casi caiga de la silla en la que se encontraba sentado.

- Por Dios Boby casi me matas del susto! - dijo de forma exageradamente dramática llevándose una mano al pecho.

- No seas melodramático Tae y presta atención - dijo tratando de contener la risa que amenazaba con salir de sus labios ante la actitud finida de su amigo.

- Soy todo oídos - espetó el castaño.

- Sabes que la enfermera que siempre nos ayuda está hoy de guardia? - levantando una ceja.

- No sabía, pero... eso que tiene que ver con lo de Daniela? - preguntó de manera incrédula.

- Aishhhh! Tú si que eres lento! - le espetó un poco fastidiado por no seguirle el plan - Ella te dejará salir de la habitación para que puedas "conversar" con tu "novia", ya entiendes?

- No del todo - dijo el castaño con una mueca en la boca que denotaba la duda que tenía - pretendes que le pida ser novios en la sala de visitas? no creo que sea el lugar más romántico, quiero que sea algo especial; y si mejor espero a que salgamos del hospital y ahí se lo pido como Dios manda? digo, así tenemos tiempo de sobra para conocernos lo suficiente no crees?

-No! - dijo lanzando un grito que seguramente se escucho hasta en el pabellón de maternidad que se encontraba al otro extremo del hospital.

Tae lo miro frunciendo el cejo, no entendía por que la prisa de su amigo en que le pidiera a la morena ser novios; estaba claro que El seguía desconociendo la enfermedad de la chica, aquella les había pedido a Mariane y Boby que por favor no le contaran nada de su enfermedad al castaño, en principio porque no quería que éste tuviera lástima de ella y en segunda porque no quería que se alejara asustado, así que Boby debía ser muy cuidadoso en lo que decía delante de Tae para evitar que éste descubra el oscuro secreto de Daniela.

- No! - repitió bajando un poco más el tono de su voz - porque vas a perder el tiempo, no crees que es tonto eso?, digo puedes disfrutar todo este tiempo que estén en el hospital de estar juntos, imagina que le den el alta y... que tal si viene algún listo y te la roba? la perderías tontamente por "esperar?", no crees que es mejor decírselo ya y aprovechar todo este tiempo?, digo, así cuando ambos estén fuera de aquí podrán seguirse viendo - fingiendo una sonrisa y tratando de no mirar directamente a los ojos del castaño.

Boby sabía que ese "estar juntos después" era algo que no podría darse por culpa de esa maldita enfermedad; pero no le quedaba más remedio que mentirle  su amigo, quería que Tae fuera feliz hasta el último día que pudiese estar con la chica, que lograra estar con la única persona que había logrado arrancarle una sonrisa sin ningún esfuerzo ni motivo, quería que por una vez su amigo se sintiera un chico normal.

Tae lo miró por unos instantes intentando entender lo que su amigo pretendía.

- Dónde entonces pretendes que nos veamos? -le preguntó al rubio.

- En la azotea!, - señalando hacia arriba - es el lugar más románico que podrás encontrar en este aburrido hospital; piénsalo!, una declaración bajo las estrellas y a la luz de la luna, no crees que es la cosa más cursi que pueda existir? - Tae levantó una ceja mirándolo firmemente, acaso su amigo le había dicho una cosa cursi? donde estaba su amigo y quien era este tipo delante de El?, la idea después de todo no era del todo mala, lo malo era como llegarían hasta arriba sin ser vistos.

- Cómo se nota que Mariane te trae caminando entre nubes, quién eres tú y donde está mi insípido amigo? - dijo soltando una carcajada, el rubio lo miró haciendo una mueca de desagrado.

- Oye! - espetó molesto - que sepas que puedo llegar a ser un chico muy tierno cuando me lo propongo y más si se trata de una chica linda!

Tae lo miró celoso.

- Hey! tranquilo me refería a Mariane! - Tae levantó una ceja e hizo una mueca en señal de fastidio -  No estoy diciendo que Dany no sea atractiva, sólo que...

- Sólo que es mejor que te calles y no sigas metiendo la pata - dijo fastidiado.

- si! será mejor que me calle - dijo asintiendo con la cabeza para luego susurrar - ella no es mi tipo.

Tae soltó un suspiro pero no dijo nada a pesar que había logrado oír a su amigo lanzar aquel comentario sobre su chica, la azotea era un buen lugar ese sería su lugar romántico, dibujó una enorme sonrisa mientras dejaba que su mente viajara al lado de la morena.