Capítulo 18: El corazón en las nubes

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*Kiara estaba cenando con Dax y sus padres y todo iba bien... hasta que ha aparecido Pierce*

Peter: ¿Quieres venirte conmigo a Los Ángeles, Kiara?

Kiara: ¿Me lo dices en serio? ¿De verdad me estás pidiendo que me vaya contigo?

Peter: Ya sé que es algo inesperado ...

Kiara: Peter ... Es que acabo de conseguir este puesto en RichDreams ...

Peter: Ya lo sé ...

Kiara: Es demasiado, Peter.

Peter: ¡Hay muchas empresas en Los Ángeles que estarán encantadas de contratarte! Igual hasta mejores que RichDreams.

Kiara: ¿De verdad? ¿Tú crees?

Peter: No sé ..., es que pensaba que si sintieras lo mismo que yo ...

Kiara: ¿Por qué tienes tantas ganas de irte?

Peter: Creo que no encajo en este sitio.

*Peter traga saliva y desvía la mirada de Kiara*

Peter: No hace falta que me digas si o no ahora mismo. Ya sé que son muchas cosas las que hay que asimilar, pero ... no sé, piénsatelo.

Kiara: ¿¡Me lo estás diciendo en serio!? Mira, Peter, voy a ser franca. No siento nada por ti. Además, ya sabes que no dejaría mi puesto en RichDreams por nada en el mundo.

Peter: Siento habértelo preguntado.

*Peter se va, pero Kiara se queda unos minutos allí, quieta, en silencio, y de pronto Dax sale al vestíbulo. Al verla, se acerca a ella*

Dax: ¿Va todo bien?

Kiara: Si, es que ...

Dax: ¿Es que, ¿qué?

Kiara: Necesitaba tomar un poco de aire.

*Kiara respira hondo y le sonríe*

Kiara: Ahora sí, podemos entrar.

*El resto de la cena transcurre sin incidencias. Pierce habla sobre todo de su nuevo trabajo y lo que le ha preguntado antes a Kiara parece haberse quedado en el olvido. Más tarde, Dax y Kiara vuelven a casa*

Dax: Mira, tengo que confesarte una cosa ... He oído tu conversación con Peter

Kiara: ¿De verdad?

Dax: He oído que te contaba lo que sentía por ti.

Kiara: Verás ... Mi corazón solo te pertenece a ti.

Dax: ¿Me lo dices en serio?

Kiara: Sí. Te quiero Dax Richmond. Nunca nadie me ha hecho sentirme así y ...

*No termina la frase, porque Dax se abalanza sobre sus labios. La coge en brazos y la levanta del suelo. Las piernas de Kiara se anudan a la cintura de Dax y se pierden en un beso apasionado. Sus labios se devoran mutuamente unos minutos, hasta que Dax se separa y la mira a los ojos. Kiara ve en su mirada tanto amor y tanto cariño que tiene la impresión de que le va a estallar el corazón*

Dax: Yo también te quiero, Kiara. En su día, pensaba que sabía qué era el amor. Desde luego, sabía lo que era que te partieran el corazón. Pero qué equivocado estaba ... Hasta que te conocí, no sabía lo que era de verdad el amor.

*A Kiara le empiezan a brotar lágrimas de felicidad de los ojos. Siente que se apoderan de ella tantas emociones que no sabe cómo reaccionar. Kiara le sonríe y lo besa con ternura. Esta vez, no siente ninguna prisa; disfruta de cada segundo que le ofrecen sus labios. Nota que Dax se mueve, pero no se separan ni un segundo. Dax la coloca suavemente en la cama y le pasa los dedos por el costado, contemplándola desde arriba*

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