𝐒𝐢 𝐩𝐨𝐝𝐞𝐦𝐨𝐬 𝐣𝐮𝐧𝐭𝐚𝐬 ~𝐌𝐚𝐱 𝐌𝐚𝐲𝐟𝐢𝐞𝐥𝐝~

¿𝕰𝖘𝖙𝖆́𝖘 𝖇𝖎𝖊𝖓, 𝖆𝖒𝖔𝖗?

Narra: Max Mayfield

-

—Y... Se levantó en el aire y... Y se quedó ahí. En el aire —Nos dijo Eddie, recordando la noche en la que Chrissy murió.— Y después... Empezaron a romperse sus huesos en partes. Sus ojos, enserio... Fue como si su cabeza hubiera algo dentro jalando. No supe que hacer, así que... Salí corriendo. La deje ahí. —Nosotros solo nos quedamos callados— Creen que estoy loco, ¿No?

—No, no creeme que estés loco. —Dijo Dustin

—¡No me digas mentiras! ¡Se como suena! —Nos grito Eddie

—No es mentira. —Dije yo ahora.

-Te creemos —Dijo Robin

—Oye. —Escuche decir por primera vez en mucho rato a Fer— Lo que voy a decir podria ser algo... Difícil de aceptar.

—Okey. —Dijo Eddie, asustado.

—¿Has escuchado decir que Hawkins está... Maldito? —Eddie solo se quedó callado— Pues, no... Se equivocan. Hay otro mundo. Un mundo oculto debajo de Hawkins. A veces, se filtra al nuestro. —Explico Fer.

—¿Cómo fantasmas y así? —Pregunto Eddie.

—Hay cosas peores que los fantasmas.

—Esos moustros del otro mundo... Pensamos que se habían ido. —Dijo Dustin ahora

-Pero ya an vuelto otras veces. Y por eso debíamos encontrarte. —Dijo Fer

—Si volvieron, debemos saberlo.

—Esa noche... ¿Viste algo? —Pregunto Robin

—Partículas, por ejemplo

Eddie solo nego.

—Puede parecer polvo. Un remolino de polvo. —Dijo Dustin dando otro ejemplo

-No, amigo, no ví nada. Ni... Sentí nada. Les juro que trate de despertarla. Pero no sé movia. Estaba como... En trance o algo así.

—O bajo un hechizo —Dijo Dustin

—Una maldición. —Siguió Eddie.

—La maldición de Vecna. —Termino Dustin.

—¿Quien es Vecna? -Pregunto Steve

—Si, yo igual quiero saber —Dijo Fer poniendo mucha más atención

—Es un muerto viviente... De gran poder. —Nos explico Dustin.

—Un poderoso hechicero.

—Un mago oscuro.

(...)

Nos habíamos ido de la casa del Rick el Grifo. Steve me fue a dejar a mi primero, pero le pedí a Fer que se quedará conmigo, algo que hace tiempo no le pedía.

—Las quiero mañana temprano para ir a dónde Eddie, ¿Me escucharte Fer? Te conozco. —Le dijo Steve.

—Si Steve. No soy una niña. —Respondió Fer, De mala gana.

—Okey, cuídense, ¿Si? —Nos dijo Steve y se fue.

—Entremos, mi madre hoy trabaja de noche, así que no hay nadie. —Dije yo, mientras habría la puerta.