-Nos vemos luego!!!
-Adios!!!Se despidió el grupo de amigos mientras ellas bajaban del auto. El viaje a la playa fue todo un éxito, hubo comida, música y muchos chistes que tardarían meses (y quién sabe si años) en olvidar. Lisa y Katy estaban agotadas pero felices, hacía tiempo no compartían con ese grupo de amigos, pues su vida había cambiado bastante en poco tiempo: su relación, la mudanza, el trabajo, los planes para adoptar un lindo cachorro, entre otra cosas. Aun así, ambas comprendían que la nostalgia era un agradable sentimiento y es bueno permitirle entrar una vez cada milenio.
Mientras tomaban el sendero para llegar a casa Katy no pudo evitar detenerse a mirar hacía arriba, miles de estrellas esparcidas a lo largo de todo el oscuro cielo azul alumbraban su camino como unica fuente de luz, un caótico espectáculo en el que no había rastros de luna. ¿Podía algo tan corriente como el cielo ser así de hermoso? Quizá siempre luce de esta manera ¿Pero que pasa si estamos tan acostumbramos a verlo como un factor más en nuestro entorno que lo volvimos algo corriente? ¿Acaso todos en algún punto de su vida se detienen a mirar el cielo nocturno de verdad? ¿Cómo sería si...
-Katy. -Dijo Lisa sacándola de su estelar monólogo interno- Otra vez?.
-Lo siento. -Dijo Katy apenada, a sabiendas de que más tarde le contaría a Lisa que pasaba por su cabeza y que ella le prestaría toda la atención del mundo.
Siguieron caminando en cómodo silencio, cruzando la hierba hasta llegar a la entrada de su casa, amaban su casa.
Era una diminuta vivienda de dos plantas, según los vecinos perteneció a una linda pareja durante la guerra fría, el esposo fue reclutado y murió en acción, la esposa se colgó usando las cortinas del baño. Quizá por eso nadie más quería comprarla hasta que llegaron ellas, no eran para nada supersticiosas y el miedo colectivo les resultaba gracioso.
Un camino de piedras conducía a la puerta exterior, que por alguna razón traía más cerraduras de la cuenta, la fachada era de un tono amarillo muy claro, un poco quemado por el sol, y una enredadera dominaba gran parte del lado izquierdo la casa.
Justo al abrir la puerta un estrepitoso ruido llego a sus oídos, tomándolas por sorpresa primero, provocan sus risas al reconocerlo.
-¿Cuál es el chiste? A mí no me da risa -pregunto Rob fingiendo molestia al sacar la cabeza del auto, cubierta de grasa.
Robert Larson, o el viejo Rob como lo llama todo el mundo, es el vecino más cercano de Lisa y Katy. Desde que las chicas se mudaron Rob se ofreció a ayudarlas reparando el Ford Anglia que vino atado a la casa, atado es el término más cercano a la situación, pues el auto estaba repleto de maleza hasta el último engranaje y pegado al patio del frente, sin embargo, el viejo Rob les aseguró que con un poco de tiempo lograría dejarlo como nuevo, Rob era muy optimista en opinion de ellas.
-Que tal va nuestro auto Rob? -Pregunto Katy
-A este ritmo podrían salir a pasear en un mes- dijo Rob tras limpiarse la cara con un trapo que sacó de su bolsillo y dejo en una mesita.
Lisa lo quemará en la menor oportunidad pensó katy, es horroroso.
-Quizá deberías volver a casa Rob, tu esposa seguro está muy preocupada - dijo Lisa acercándose y tomando a Katy de la cintura, y confirmando su sospechas, arrugando el entrecejo al notar el trapo puesto en su preciada mesa.
- Mí linda Norma sabe que no estoy haciendo locuras -dijo Rob con su habitual buen humor- un momento... ¡con un demonio! mañana no podré venir, vamos a casa de la hermana de Norma a comer pastel con los niños.
Tras decirle que no había problema Lisa fue a despedirlo mientras Katy dejaba los bolsos en el recibidor, una vez Rob se fue, Lisa entro con un notorio gesto de asco y el horroroso trapo en su mano, dirigiéndose a la cocina mientras decía para si misma.
- Que carajos le pasará por la cabeza a ese hombre?
~
Decidieron que habían comido suficiente en la playa, tomaron un baño, se vistieron y bajaron a servirse limonada. Conversaron un rato sobre lo todo lo ocurrido durante el día, ambas estuvieron de acuerdo en un punto, necesitaban nuevos amigos. Más tarde salieron al porche para acostarse en la hamaca que allí tenían, justo debajo del tragaluz y al lado de la mesita, ahora impecable, donde dejaron los vasos.
- Hay que decirle a Rob que dejé el auto, es un caso perdido. -Dijo Lisa, hacía tiempo que venía pensando es eso pero era la primera vez que se lo comentaba a Katy.
-Pero está muy feliz tratando de hacer que funcione, quizás lo logra. -Dijo Katy esperanzada, le emocionaba la idea de aprender a manejar y poder viajar junto a Lisa a cualquier sitio que quisieran.
- Ambos son igual de ilusos -Dijo Lisa tratando de molestar a Katy.
-Ilusa yo? Y de quién fue la idea de dejarlo todo y comprar una casa en el campo? -Respondió Katy haciéndose la ofendida.
- Bien tu ganas -Dijo Lisa dándole un tierno beso en la frente a Katy- Pero que no se te suba a la cabeza.
- Cállate, yo gano -Dijo Katy devolviendo el beso esta vez en sus labios.
Ambas se acomodaron a admirar el cielo a través del tragaluz, cuando Katy vio la luna brillando justo sobre su cabeza y recordó de repente
-Oye Lisa
-Si?
-Alguna vez has detallado el cielo?
Fin

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✨El Viaje A La Playa✨
Historia Corta✨Lisa y Katy vuelven a casa luego de de una lindo viaje a la playa con sus amigos✨ Este es un lindo sueño que tuve hace bastante tiempo, decidí que era mejor escribirlo que olvidarlo, ojalá les guste. (Los nombres reales de las protagonistas estás c...