24.2 .- Shutdown

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Rosé: ¿Podemos hablar? - la castaña rio nerviosa y miro a todos lados, si mal no recordabs era inicios de mes y ya hacia un mes que estaba viviendo con Rosé, tal vez la chica estaba molesta porque no le habia pagado asi que antes de sentarse suspiro asintiendo pero caminado hasta la mochila que habia llevado con ella cuando regreso con sus padres.

- Esto me da mala espina - rio nerviosa sintiendose mareada- Antes de que digas algo - suspiró sacando de la mochila un sobre manila y caminó de regreso a ella para dejarselo frente, sobre la mesita de centro y tomar asiento frente a ella en un sofá individual - Se que no he sido buena compañera de casa, de hecho no creo ser la mejor pues constantemente me has pedido darte tu espacio, cosa que no hice, y debido a que de nuevo en la escuela se han creado rumores debo decirte que antes de que me eches yo saldré de ahí.

Rosé: ¿De que estas hablando?

- No soy agradable, Park - se dejó caer en el sillón resignada sintiendo un nudo en el pecho - Ambas lo sabemos, soy rara y aunque intento hacerme la desentendida en la universidad hablan mucho de mi y seguramente lo menos que quieres es una compañera fenomeno, abusadora y sobre todo fastidiosa- miró al techo tratando de alivar el dolor de su pecho con las palabras que decia.

Rosé: Aun no te estoy entendiendo. No me haz dejado hablar y ya supusiste cosas de mi - sonrió sin gracia sintiendo como la molestia empezaba a reinar - O sea no es que me agrades demasiado pero tampoco puedes juzgarme.

- Tienes razón - se enderezó en su sofá y me miró- Voy a dejar la universidad - confesó tomando por sorpresa a la neozelandesa - Haz oido los rumores, ademas realmente me descuide demasiado y ahora lo estoy pagando.

Rosé: ¿Sabes porque vine hasta aqui? - preguntó y la chica se encogio de hombros - Parece que te gusta sacar conclusiones.

- No - se rascó el puente de la nariz bajando la cabeza y la mirada - De hecho me doy cuenta con acciones, señorita Park. Soy alguien desagradable - suspiró con cansancio - Yo se que la he estado molestando asi que me disculpo siempre suelo ser una molestia y nadie lo dice, incluso ahora estoy siendo una molestia para mis padres en mi condición y situación, sin embargi ellos me soportan por que soy su unica hija.

Rosé: ¿Por que piensas eso? - se puso de pie y caminó hasta ella para inclinarse a su altura - Si para ti las acciones son las que hablan mas que las palabras no me hagas arrepentirme de lo que haré.

- Pero que... - las palabras se habian quedado al aire cuando los labios de Rosé se estrellaron contra los suyos y se movieron con lentitud sobre los de ella, habia tratado de reaccionar y cuando lo hizo por instinto llevó sus manos a la cintura de la chica atrayendola a su cuerpo haciendo que se sentara a horcajadas sobre ella.

Rosé se separo de ella agitada y la abrazó por el cuello acomodandose en el espacio que les dejaba aquel sofá individual.

Rosé: Eres increiblemente estupida - escuchó la risita de la ojiazul y se apartó para mirarla - Pero me gustas y eso me da miedo - confesó sorprendiendo a la chica.

¿Ella le gustaba?

Claro que lo hacia, si no en ningun momento la hubieran besado. La ojiazul sonrió y escondio su rostro sonrojado en el cuello de la chica apretando los labios sin que ella se diera cuenta.

- Tu me gustas mucho, Rosie- la abrazó por la cintura escondiendo su rostro en el cuello de la neozelandesa aspirando el aroma de la rubia. Coco chanel, que apartir de ese momento seria su aroma favorito.

Rosé sintió una ola de calor viajar por su cuerpo hasta su centro y cuando quiso reaccionar la chica ya se encontraba dejando besos húmedos en su cuello. Un gemido salio de su boca excitando a la ojiazul. La rubia tomó del cuello a la chica pegandola aun mas a su cuello y gimiendo.

𝙾𝚗𝚌𝚎 𝚄𝚙𝚘𝚗 𝙰 𝚃𝚒𝚖𝚎 (𝚆𝚒𝚝𝚑 𝚁𝙾𝚂𝙴́)[Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora