Nuestra tercera vida.

Capítulo 2

YoonGi entró a la residencia notando que todo ya estaba totalmente limpio y arreglado como si nada ubiera pasado.

— Señor Min.

Uno de los tanto subordinados le llamó, llevaba una tableta en las manos y se acercaba con  rapidez siguiendo su paso. Antes de que entrará a la mansión.

— He encontrado lo que me a pedido. — Le dio la tableta y se postro a su lado. — Ninguna de las placas coinciden con el registro vehícular por lo que no pudimos rastrear la ubicación, la placas son de autos robado hace más de diez años y las camiones son de última generación, intentamos rastrear la última que desapareció pero ningún satélite encontró nada.

— Hagan lo que sea, muevan agua y tierra pero lo quiero, quiero saber dónde está.

Sin más le entregó la tableta de vuelta y se acercó a la puerta.

Pero esta vez otro subordinado lo detuvo.

— Señor.

— ¡Qué mierda quieres!

Rugió con fuerza haciendo que el otro se hundiera en si mismo.

— Si no tienes información de la señora y dueña de esta casa te metere una bala en la cien.

— Es de eso lo que quiero hablar con usted, la señorita Min esta aquí desde hace dos horas aproximadamente, esta en la sala de recuperación con  los demás señores, el doctor la atiende.

Dejó al otro con la palabra en la boca pues tan pronto escucho que ella estaba ahí dio marcha por la enorme casa, escaleras arriba, por los pasillos escucho un desgarrador grito que lo hizo desplazarse aún con más velocidad y fuerza.

Al llegar a la sala donde se encontraban no dudó en girar la perilla para adentrarse a la misma,  pero sólo avanzó un par de pasos al mirar a la chica en la cama con las manos a los lados de su cuerpo mientras apretaba con fuerza su manta que tapaba la camilla.

JungKook a la mano derecho del doctor sosteniendo un par de objetos médicos, mientras que el otro se encargaba de ponerle puntadas.

— ¡¿Qué mierda?! ¿Qué coños fue lo que pasó?

Con molestia se iba acercar pero la mano libre de NamJoon lo detuvo.

— Tranquilo, el médico la revisó y al parecer todo está bien por ahora.

— ¿Qué mierda sucedió?

— Calmate, ve a ducharte y cambiarte, después yo te daré detalles de lo que pasó.

— Nam tiene razón YoonGi, la sala esta esterilizada y tu estas lleno de lodo y sangre. No es bueno para Tn que tu estés lleno de suciedad, bañate, baja y te diremos todo lo que pasó con el más mínimo detalle.

Sin más acató la orden.

— Cuidenla.

Sin más salió de la habitación para tomar una ducha y deshacerse de la peste que traía encima.

Tenía muchas dudas en la cabeza, inclusive estaba jodidamente enojado aún, pero al sentir la sensación del agua caliente bajar por su piel quitando todo rastro de suciedad y sangre.

Aun que faltaba su pequeño remolino con el, bañandose junto a él, quejándose sobre cómo le tomaba en la ducha.

Sin más se baño bien para no dejar el olor de mierda impectado en su piel.

Salió del baño para dirigirse a su armario para tomar unos jeans claros rasgados junto una camisa blanca de vestir desabotonada de los primeros tres botones dejando al descubierto su cuello y clavículas. Unos Nike  para acompañar y se desenrredo su cabello dejando lo secar al aire libre.