sustituida ;c

1 0 0
                                    

°°Dónde el amor no es eterno, las promesas no son para siempre y el contacto físico reconforta el vacío del alma.

Busque con la mirada sus ojos y lo abracé- Soy muy infantil para la mayoría de cosas, pero nuestros problemas y la relación es entre nosotros solamente sin importar los demás, porque yo te amo y eso es lo que importa. ¿Ok? - sonreí con pequeñas lágrimas amenazando salir y el solo sujetó con más fuerza mi espalda.

°°°

Acacia Morales es una chica bastante afortunada pues goza de una familia unida, es hija única, además de poseer una vida soñada, podría ser el tipo ideal de chica que los padres amarían de tener, brillante, inteligente y verdaderamente linda.

Saúl Aguilar el chico cliché rebelde pero buena gente, clase del que una gran mujer como Morales debería alejarse, pero no nos dejemos apantallar por la apariencias. Pues él no es quién te atraería por sus grandes notas altas y académicamente sorprendente. Sin embargo te encantará tenerlo por su trato y cariño, ser la mala influencia nunca fue tan drástico.

Aún por más descabellado que parezca, son claramente felices sin importar su posición moral o social. Pero como todo cuento de hadas, la maldad rodea sus vidas, en este caso la cizaña y malas caras. Que eventualmente ha llevado a las críticas de las cuales destaca una "¿Qué haces con el sino es bueno para ti?"

Está acostumbrado a ello,  no obstante siente que al ser comparado con ella sería la peor elección pero ella tiene un pensamiento totalmente distinto..

°°°

Sabes porque aún estoy contigo..- dije mientras acariciaba su rostro y miraba con ternura- Porque?- me observó con una leve expresión de tristeza- Porque te amo demasiado- en mi rostro se formó una sonrisa de oreja a oreja pese a que respondiera- Debiste hacerle caso a los demás, yo solo soy experto a cómo lastimarte y..- desistí en confusión- ¿Q.que?, No- el se enderezó y sentó a mi lado con la mirada baja- Tus amigas te han visto llorar Acacia ..- tomó mi mano y la acarició con suavidad.

Simplemente sentí como me quedé sin palabras al escucharlo. Busque con mi mirada sus ojos y lo abracé- La verdad, soy muy infantil para la mayoría de cosas, pero nuestros problemas y la relación es entre nosotros solamente sin importar los demás, yo te amo y eso es lo que importa, ¿Ok? - sonreí con pequeñas lágrimas amenazando salir y el solo sujetó con más fuerza mi espalda.

Pdt : hola! Trataré de permanecer con esta descripción espero de verdad les guste. De hecho estoy reescribiendo los primeros capítulos para que me entienda el contexto de las cosas.

•••

Flashback
‹ACACIA›

"Desde el comienzo"

Bajé las escaleras en busca de quien tocaba, y al abrirla estaba ahí parado sonriendo. Vestido con unos jeans holgados con decorado rasgado, a juego con una camiseta blanca de rayas azul marino - Vine por ti - se encontraba realmente presentable de una manera provocadora. Podría decir que daba pena ajena con mis mini shorts negros y mi playera corta color amarillo, agregando que mi cabello estaba en un moño desordenado, comparada con el me veía fatal.

- Lo olvidé - confesé

- Te ves genial- dijo maravillado

- Me veo muy mal - reí nerviosa pero no creyó que fuera un chiste de gracia.

- ¿De qué hablas? Acaso no te has visto en un espejo... Eres jodidamente hermosa - afirmó y tiró de mi brazo atrayendo mi cuerpo al suyo.

De verdad sabía cómo
hacerme sentir bien, podría decir que era el mejor, ¿porque cambiarlo como si se tratase de mis calzoncillos o un ser horrible?, era perfecto bueno lo es, tan mío.

- Menso - hice un pequeño puchero con mi boca que se asimilaban a una rosquilla aplastada y mordió mi labio inferior dejando de sobra una sonrisa de dientes completos.

Después de ello me convenció de ir así vestida, solo me coloqué unos tenis delgados de agujetas blancas y me puse una gorra para ocultar mis greñas alborotadas. Cerré la puerta como debía y fui junto a el dónde el parque, lugar del encuentro, así nos sentamos en una banca cercana a un área verde protegida, rodeada de una mediana rejilla blanca, de la cual solo se podía admirar por medio de la vista.

Me miraba de un lado al otro con espera de algo, trama algo y debo averiguarlo. Apoyé mi cabeza sobre su hombro, viéndolo con ternura desde su mandíbula, la vista era fenomenal sin importar el ángulo donde me mantuviera.

Talvez hablé demasiado de lo lindo y bueno que está y se pude notar a la vista pero, simplemente soy chica, además como no querer a un flaco, alto, pelo negro, ojos claros, rostro atractivo de manera estética y un cuerpo en forma. Además de ser romántico, detallista, caballeroso, sencillamente Lindo.

Pasando al tema de mis padres, todo iba exelente desde que se enteraron de nuestro noviazgo y le caía bastante bien a mi mamá, aún me preguntó cómo podía hacer para crear largas y entretenidas conversaciones. Yo me conformaría con un hola buen día.

Acacia..?- habló sacándome de mis pensamientos y le tomé de la mano - Si. - agite la cabeza para recuperarme de la vista nublada y así dirigirme a él. - ¿Qué pasá? Hace un rato te había hablado, no te gusta...?- apretó su agarré y lo tome del hombro- No. Quiero decir, todo está muy bien mi niño - sonreí. Planté un pequeño y corto beso en sus labios para que no se sintiera mal.

No lo parece bebé – me miró triste pero lo abracé haciendo que su cabeza quedará sobre mi pecho de manera gentil– oh cariño si supieras lo lindo que me haces sentir aún teniéndote en frente.

– no sabes cuánto te amo preciosa..

– Y yo más a ti mi niño

Aún cuando el pequeño problema había sucedido, pudo fluir con naturalidad la cita, siguió siendo cariñoso y me gustaba mucho más, muy adorable. Un tiempo más tarde llegó un señor de los helados por lo que obviamente nos dirigimos hacia allá, era la primera vez que un don me hacía compartir combinaciones raras.

Mientras tanto personas pasaban con curiosos patrones y colores que se hacían ver en sus camisetas, tops, pantalones, shorts, se podría ver una extensa variedad de prendas durante más gente aparecía. Se veían totalmente geniales, pero ya no me importaba, solo estar con el ahora.

Una dulce y agradable melodía resonaba hacia un lugar indefinido apoderándose de todo, el saber de dónde provenía era complicado pues habían desde las mandalas de metal que colgaban de un colorido puesto de souvenirs con marcos de fotografías, playeras, bolígrafos y lentes decorados con las iniciales de la ciudad. Hasta un gran xilofono enorme acompañado con una guitarra eléctrica que le hacía más divertida la tonada.

El sonido se agrandaba a medida que iban tocando y pronto llegó un señor con tambor que colgaba desde ambos hombros, el cual sonaba como un "tap, tap, tada, tap, tap, dara, tap" con un raro canto "eh, pa, yuh, eh"

La vista era estupenda, alegre y encendida, en este momento todo iba bien, parecía que le gustaba la salida.– Amo el café – admití y sonreí de vuelta al verlo– ¿Todo bien?– reí dudosa– Exelente...– deslizó su dedo sobre la porción del helado y manchó un poco mi mejilla – hey! – lo fulmine con la mirada de manera divertida y le devolví el movimiento. Un par de veces hasta que me esquivó y enfurecida intenté de nuevo, pero no pude, así que me rendí, oh bueno eso le haría creer. – Tú ganas– agaché la cabeza y en un contra ataque lo hice, para luego burlarme. Me tomó de los hombros y me besé, cubriendo mis labios del helado que en ese instante habíamos estado comiendo.

Una cabina de fotos– pensé. ¿Qué mejor manera que plasmar este momento en un maravilloso recuerdo...?– Vamos- sujeté su brazo- pero ya es tarde, seguramente ya te han de estar esperando- sonreí- hasta crees, anda porfavor, ¿Si?- hice mínimos pucheros- ni con eso podrás- entrecerré los ojos con seriedad- bueno entonces yo iré sola- fingí dejarlo ahí y marcharme- ven acá - alzó la voz.

Oh vamos– declaró – oh sí, no es tan difícil–Hice una mini mueca mientras la fotografía sale –Que decías?– mencionó burlón – nada..– me acomodó para la siguiente foto.

– Salieron muy lindas..

– si..

–Dime, ¿Qué harías sin mí?

– No lo sé...– respondió de forma divertida.

Fragmentos•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora