Mi corazón vive en el pasado

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Evangeline

Me encontraba en mi habitación, recostada en mi cama, mientras veía el teléfono, sin nada que hacer claramente, hasta que una llamada interrumpió el tiktok número 30 que veía.

-Vesper...-susurre con cierta molestia, así que respondí la llamada.

-¡Cara de cebollaaa!- comenzó a gritar, molesta rodé los ojos.

-¿Qué paso Vesper?- le pregunté con cierta amabilidad que se comenzaba a agotar.

-¡No me vas a creer lo que estoy apunto de decirte!- me grito entre nervioso y feliz.

-Carajo Vesper, cierta razón tienen las chicas al no querer salir o coger contigo, no vas al grano, ¡Dime imbécil!- le grite ya harta.

-En primera, tú y yo no hemos salido, ni cogido, aunque estuvimos apunto por pasarnos de copas.....- lo interrumpí.

-¡Al grano Vesper!- le grite de nuevo, esas imágenes veían como rayo a mi cerebro, y me daban ciertos cosquilleos nerviosos.

-Vincent....- ya sabía a donde iba esto, quería saber si había pasado esa noche que él se fue de mi lado....hace 3 años...

-Vesper, ¿Cuántas veces lo tengo que decir?, solo fue un pequeño beso, nada más, él debe de ser muy feliz en Alemania y tú y yo atormentándonos..- ahora fue el quien me interrumpió.

-Vincent esta en la ciudad- dijo sin más, mi cuerpo se tensó y me quedé estática, no podía hablar, mi garganta no me ayudaba a sacar un gran grito de enojo.-¿cariño?- escuche en la otra línea, Vesper, mi mejor amigo, mi yo en versión hombre estaba en la otra línea tratándome con el cariño que me tiene, preguntándome si seguía allí.

-¿Cómo sabes eso?- pregunté con cierto nerviosismo.

-Bueno, lo estoy viendo ahora en la oficina, charlando con el agente Zabala, tomando un café, mientras él le comenta el clima- explicó de cierta manera detallada Vesper.

-Carajo....menos mal que hoy tuve descanso...no pienso toparme con él pero ni con las sombras- le contesté a Vesper.

-Si...con respecto a eso, creo escuchar que él trabajará contigo, como tu acompañante de casos...-dijo con cierto temor.

-¡QUE DEMONIOS ACABAS DE DECIR VESPER!- grite con un enojo hasta la medula espinal, sentía como mi sangre se calentaba muy muy rápido.

-Perdona...le dije al jefe que tú y yo somos colegas y que trabajamos siempre juntos y así resolvemos los casos desde hace 3 años, pero se paso mis palabras por la cola, porque ahora Vincent se nos une y no pude decir nada más ni expresar algún gesto alguno, aunque debo de decir que Vincent se alegro de verme- contestó al final  para reír un poco.

-¿Así?, ¿y porque no te lo besas si quieres?, digo, como ahora vamos a compartir oficina, NO SABES LAS GANAS QUE TENGO DE DECIRLE AL JEFE QUE SE VALLA MUY ALA M****- exprese con el enojo a flor de piel.

-¡Hey!, no es mi problema lo que paso con ustedes dos, además, creo que él ya paso página, porque preguntó por ti y se alegro al saber que eres feliz, soltera, pero feliz- me comentó y me recordó al final.

-Ni tan soltera, el ridículo de Carl me invito hoy al cine- le comenté con cierto malestar.

-Aggh, el intenso de Carl, dile que tú y yo quedamos para ir al cenar, es más, te invito a cenar en tu restaurante favorito, paso por ti a las 8:00 pm- me comentó y luego me invito.

-¡Dios Vesper!, ¿Qué hice para merecerte?- le pregunté con una sonrisa.

-Ser una idiota Eva, ser una idiota...-susurro con gracia y nos hundimos en risas.

Murders and RomanceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora