Un reencuentro no muy agradable de los amantes pasados

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- ¿Que me ha pasado? - preguntó Katome al despertarse.
- te encontramos desmayada en el bosque - me informa la anciana- te ha traido Inuyasha, se ve que esta muy preocupado por ti.
- Tengo ganas de vomitar, permiso - sale corriendo de la cabaña y entonces vomita todo o que llebaba dentro, menos el bebé.
Lo primero que hace al entrar en la cabaña es preguntar quanto hace que llebaba desmayada y le respondieron que llebaba un més y medio por culpa de que tenia mucha fiebre.

Se fue a su casa y se quedó una temporada, un presentimiento suyo evitó que su familia no volviese a morir asesinados, por que es los llevó a la era del Sengoku junto con ella. Antes de irse borraron todo tipo de información como si se fueran a otro país así, nadie sabria que se fieron de esa epoca y el asesino no sabría como encontrarlos.
Todas estas molestias tardaron más de tres meses y Kagome iva a peor por culpa de las nauseas, los vomitos y los dolores de barriga, espalda y columna. Se dió cuenta de que ya hacia tres meses que no le vajaba la regla y eso preocupó a su madre así que fueron a un medico, el medico les informó que Kagome estaba embarazada de quatro meses y era todo peor por que ella no recordaba quien era el padre del bebé, recordaba vagamente escenas de el acto en sí, de los gemidos y los besosl de el dolor y el placer, pero la imagen de ese hombre estaba siempre borrosa.

Al llegar a la era del Sengoku, Kagome y su familia fueron a desempaquetar sus cosas a casa de la anciana Kaede, alquilaron una cabaña al lado de el templo para pasar el resto de sus vidas. Mientras tanto Kagome fue a buscar comida y antes de que encontrara un lago se desmayó por el cansancio que conllebaba tener a un hijo dentro de su vientre.
Cuando despertó estaba al lado de el rio con Rin, Jacken y Ah-ún los acompañaba también. No los recordaba, pero ellos a ella sí. Se presentaron de nuevo y Rin dijo que Sesshomaru aún no habia llegado.
- ¿Me podrian decir quien es Sesshomaru? - preguntó Kagome
- Humana insolete, como te atreves a no saber quien es Sesshomaru - funfurruñaba Jacken disgustado por la pregunta de la miko sacerdotisa.
De pronto, de la nada sale Sesshomaru acompañado de el anciano Mioga.
- Jacke, quien es esa humana apestosa - se para en seco al olfarear a
Kagome - Y por que desprende mi aroma? - ordeno respuesta al pobre Jacken.
- Esa humana se llama Kagome y no se por que desprende su aroma - confiesa.
- Yo creo que se por que desprende su aroma - informa Mioga.
- Habla, pulga - ordena Sesshomaru.
-Perdone mi atrevimiento pero creo aue usted marcó a Kagome como suya hace muy poco. Hace unos quatro meses como poco. - aclara Mioga.
- Anciano Mioga eso es imposible, pero ¿que es marcar? - pregunta kagome con suma ignorancia de niña pequeña.
- Kagome, marcar a una persona como tuya es hacerle el amor o violarla - a Kagome se le cae el alma a los pies.
- Eso es imposible nunca nadie me ha marcado como suya - se defiende Kagome.
- Eso ya lo veremos dentro de cinco meses - dictó sentencia Mioga.
- Necesito pensar un rato sola - se levantó pero perdió el equilibrio y Sesshomaru la cojió antes de que tocara el suelo.
- Aun que no sepa como es que tienes mi olor, si es que tienes a mi cachorro dentro tuyo, no voy a ser un covade y no te dejaré sola - esas palabras fueron como una declaración de lo mas patosa - Rin, Jacken, Mioga, subanse a Ah-ún que partimos hacia la aldea donde se hospeda la miko. - ordena y todos lo obedecen como buenos subditos que són.

Cuando llegan se oye a Inuyasha y Kikio que estan haciendo el amor, pasadas tres cabañas, pero aún se oyen los gemidos y los gritos de placer.
La anciana Kaede los espera sentada en el porche de su casa, e una silla hecha de madrea que Sango le trajo de un viaje.
- ¡Kagome! - la recibió con os brazos abiertos pero despues se sorprendió por ver a - ¿Sesshomaru, Rin y Jaken? ¿que hacen ustedes aquí? -preguntó desconcertada.
- Yo se lo explicaré - dice Mioga saltando e los hombros de el dayõkai. Al entrar en la cabaña le explica todo.
- Eso no puede ser posible - se sorprendió Kaede - mi niña esperando un cachorro de ni más ni menos que el mismisimo Sesshomaru no Taisho hijo de Inu No Taisho. - al acabar de formular la frase se quedó con la boca abierta de par en par.

Pasó una semana desde que Sesshomaru convivia con la miko Kagome y cada vez ellos dos estaban más enaorados, ellos no sabian por que, pero sus cuerpos les pedian que se fusionases un uno noche tras noche. Tenian que apartar el deseo de tocarse, acariciarse y besarse mutuamente para no salir corriendo a la cabaña del otro y hacer el amor.
Pero legó un dia en que Sesshomaru ya no pudo aguantar su esencia de animal y fue corriendo la casa de la miko.
- ¡Kagome ven com migo un momento! - exigió Sesshomaru exitado, Kagome obedeció y se fueron los dos al bosque. Cuando Sesshomaru empezaba a perder los estribos por culpa de el deseo, de la lujuria que tenia hacia ella Kagome se quejo.
- ¡Que haces, no, no, nó! - gritaba en forma de gemidos que retumbaban por todo el bosque.
Kagome se sintió rara al ver como Sesshomaru entraba en ella, sabía perfectamente, que el no llebaba protección y que su cachorro podria resultar herido, pero eso era secundario, el placer aue sintieron los dos al estar fusionandose, ese deseo incontrolable de amor, de lujuria, de tenerse mutuamente para ellos solos, era lo primario.
Pasaron los meses y llegó el dia en que serian padres, cuando nació el cachorro, supieron que por arte de mágia había salido yõkai completo.

Me di cuenta que amo cuando te perdi  [concluida]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora