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Sus ojos no dejaban de mirar a la pantalla realmente entusiasmado. Hace mucho había estado esperando el estreno de la tan anhelada nueva película de Doctor Strange.

Por eso con su novio quedaron en verla juntos en casa de este, con un montón de snacks, palomitas y Sprite porque a Heeseung no le gustaba la Coca-Cola y Jake decía que la Pepsi sólo tenía una lata bonita, porque la gaseosa sabía aguada.

Hee sonreía al ver a su pequeño conejito tan felíz.Shim lucía demasiado bonito. Siempre. Aunque no lo mencionara tanto, igual lo pensaba.

Aunque su sonrisa fue remplazada por una mueca de sorpresa cuando repentinamente líquido color rojizo salió de una de las fosas nasales del menor.

Se acercó a verlo y asustado le tomó del mentón.

Jake lo miró sin entender.

- ¿Qué pasa?.-sus ojitos se movieron de aquí a allá sin saber qué ocurría.

- Te está sangrando la nariz.-

Entonces Shim procedió a limpiar está con su manita y al ver esta manchada de aquel fluido frunció el ceño.

- Qué raro... No me he golpeado.-murmuró.

Y su calma se fue al caño, por la misma razón que hizo a Seung preocuparse totalmente. Esta vez su sangrado nasal aumentó en sobremanera, mojando aún más la mano con la que cubría su nariz.

- ¡Mierda, Jake, ¿qué te pasa?!.-lo agarró de los hombros.

El menor no contestó, estaba igual de confundido que él.

- Vamos al hospital, ahora.-ordenó poniéndose de pie.

....

Cuando el doctor entró nuevamente a su consulta, con los papeles de los resultados en su mano la pareja volvió a tensarse.

- Tranquilos, chicos. No es nada de lo que deban preocuparse demasiado.-les calmó.

Jake aún así buscó la mano del mayor para sostenerla y sentir protección.

- JaeYoon sólo tiene la hemoglobina demasiado alta.-

Y un suspiro aliviado escapó de los labios de los jóvenes.

El doctor rió con ternura.

- Creo que ahora sé porque... El esposo de mi madre recién inauguró su propio restaurante, y últimamente he estado yendo a comer carne allí.-confesó, y al momento se avergonzó por la mirada de reproche que le lanzó su novio.

- Debes tener más cuidado con la cantidad de proteínas que consumes. Debes tener una dieta más balanceada si no quieres andar sacándole esos sustos a tu novio.-les sonrió.

Shim sólo asintió mirando el agarré de manos que compartía con el castaño.

- Te arreglaré una cita con el nutricionista de este hospital, es un buen amigo, y estoy seguro de que hará una dieta perfecta para ti, pequeño.-

El de bonita sonrisa asintió.

- Muchas gracias, doctor Shin.-Heeseung agradeció poniéndose de pie, extendiendo su mano hacia el que aún permanecía sentado.

Realmente se le hacía una situación vergonzosa. Más porque Hee siempre le advirtió sobre su impulsivo gusto hacia las carnes.

Era bueno consumir alimentos altos en proteínas, pero todo en exceso siempre era malo.

De camino por el pasillo del hospital Ethan miró enojado al menor y este suspiró.

- Ya sé, debo comer más vegetales.-susurró sin cruzar miradas.

- Y debes hacer más caso cuando te digo algo. Es por tu bien, entiéndelo y no te comportes como un niño, ya estás bastante grandecito, Jake.-

Shim asintió avergonzado y siguió con la mirada baja. Sin embargo se sorprendió cuando el mayor le plantó un ruidoso beso lleno de amor en una de sus sienes.

- No me gusta que vengas a este lugar, Jakey, así que por favor, evitémoslo.-le pidió en voz baja, un dejo de cariño en su tono, mientras acariciaba con su nariz la mejilla del menor.

El pelinegro sonrió mostrando sus dientesitos y luego volteó el rostro para darle un besito esquimal al chico serio.

- Lo prometo.-

love dive (HeeJake)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora