HECHIZADO POR TU AMOR

CAPITULO 19

Sus ojos no podían evitar recorrer la figura de la mujer que tenía enfrente, enfundada en un baby doll negro y que mostraba mucho más de lo deseado. La mujer estaba de piernas cruzadas en el escritorio mientras se inclinaba permitiendo que sus pechos se alzaran gloriosos y mordiéndose los labios miraba a Armando

Este sentía que no podía contener el deseo que había despertado en él, su cabello suelto se extendía por todo el escritorio, su mirada felina y como se mordía los labios sensualmente mientras que con la mirada le indicaba que se acercara cosa que no dudo en hacer

Se giro y le puso seguro a la puerta y sin más se fue acercando lentamente a la vez que su mirada la recorría por completo. Cuando estuvo frente a ella, paso la yema de sus dedos por una de sus piernas logrando que ella emitiera un pequeño jadeo

A: ¿Se puede saber qué es lo que haces?

M: Vivir una aventura ¿Está mal? ¿No te apetece hacer esto conmigo?

A: Claro que quiero hacer esto contigo, no sabes la de veces que soñé tenerte aquí, claro que la visión que tengo es mucho mejor de lo imaginado -subiendo lentamente por sus piernas-

M: ¿Ah, sí? ¿Te gusta lo que ves?

A: Siempre me ha gustado incluso antes de que decidieras que el mundo debía conocer tu belleza

M: -tomándolo de la corbata- ¿De verdad crees que soy una belleza?

A: Por supuesto eso jamás lo puse en duda

M: ¿Te gusta tu despedida de soltero?

A: Me encanto, pero más me va a gustar estar casado, contigo amor

B: Pues quería recompensarte por todo, además que estaremos una semanita de ayuno forzado

A: Ayyy no me lo recuerdes, eso si este fin de semana pienso guardar reservas hasta la luna de miel

B: Jojojo y yo encantada de colaborarte

Ya no le permitió hablar se adueñó de su boca de manera exigente, le había encantado la puesta en escena y verla de aquella manera tan sensual lo había puesto a mil. De pronto lo separo de ella y la miro confundido él, lo único que deseaba era poder besarla, acariciarla, quería que sus almas se fundieran una vez más

Ella lo miro a los ojos, mientras que con sus pequeñas manos comenzó a desprender botón por botón y ante la piel que iba quedando al descubierto ella regaba un beso muy húmedo. Cuando estaba ya estaba completamente abierta ella comenzó a sacársela a la vez que acariciaba sus fuertes brazos

B: Sabes me encantan tus brazos, me siento tan protegida cuando me abrazas -acariciándolos-

A: Pues a mi gusta tenerte entre ellos, de esa manera te protejo cielo mío

Betty beso su pecho y comenzó a bajar lentamente hasta que termino de rodillas frente a él y las manos en su cintura. Alzo la mirada y él solo la veía fijamente con la lengua entre sus labios, desato el cinto y bajo la cremallera encontrándose con su intimidad más que lista, se sonrió él siempre estaba listo para ella

El pantalón cayo por su propio peso, por eso le ayudo con los zapatos, ya lo tenía como ella deseaba. Se paso la lengua por sus labios, ellos han estado infinidad de veces juntos y él le daba placer de mil maneras diferentes, pero ella jamás se había atrevido a ir más allá de lo conocido

Había estado leyendo un libro donde hablaban de las maneras de darle placer a la pareja y ella esa noche quería llevarla a cabo. Levanto la mirada, para después sin aviso alguno bajarle el bóxer haciendo que su intimidad saliera de su encierro, con algo de duda y timidez lo tomo en sus manos y comenzó a frotarlo de manera lenta