Prólogo

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Kaede Akamatsu no puede creer lo que acaba de pasar

Acaba de ser rechazada

Ella fue rechazada

Kaede Akamatsu, la mujer por la que tanto hombres y mujeres darían lo que fuesen para ser cercanos a ella y tener una pizca de su atención.Todos quisiesen que la chica más linda de la academia se les confesase, entonces... ¿Qué tenía este chico en su cabeza para rechazarla?

-por tu expresión veo que no soné lo suficiente creíble-habló de manera calmada el varón -no quiero corresponderte porque tengo pareja

-¿lo dices en serio? -le sonaba increíble que alguien quisiese seguir con su pareja después de que ella se les confesase, normalmente tanto varones como mujeres corrían a terminar a sus parejas para tener un poco de su atención

-muy en serio, tengo novio y se llama Kokich-

-ah eres gay -movió su mano para ponérsela en su frente -debí imaginarlo,solo un hombre homosexual me podría rechazar -rió con ironía

-estoy seguro de que si me gustaran las mujeres, tú sería la última en quien me fijaría-escupió con incomodidad por las palabras dichas de la fémina

-¿ah? -le miró con molestia -no te creas tan importante, sólo te dije que me gustas, no te amo para que creas que puedes tratar de humillarme, después de todo solo eres un imbécil con muy mal gusto -dijo refiriéndose a la pareja de este haciendo que Shuichi la mire con molestia -no sabes de lo que es bueno -dijo acariciando su hombro antes de retirarse de aquel lugar en el que ella lo había situado, dejándolo con un sentimiento de enojo

Caminaba por los pasillos de esa gran lugar sintiéndose orgullosa de las miradas que atraía con sus delicados pasos, como esos chicos ignoraban las palabras de sus patéticas novias sólo para verla, sonreía "amablemente" ante cada saludo o llamado mientras que el fondo solo podía ver a todos como unos insectos que estaban a su disposición, porque si eres linda podrás destacar y sobresalir.

Desde que ingresó a la academia Kibougamine, siempre ha sabido llamar la atención de la gente, ya sea por su belleza o por los actos "nobles" que se hacían saber por parte de los profesores.

Si bien se sentía genial sentir esas miradas, lo de hace rato la tenía molesta, ser rechazada por alguien tan corriente como lo era Shuichi Saihara, no era sobresaliente en nada pero se podría decir que le gustaba lo misterioso y atractivo que parecía, ahora está segura que es un idiota ciego que no sabe lo que es realmente bueno, si Shuichi no destacaba en nada, su novio era mucho peor, solo lo conocía por ser el saco de boxeo de Kaito en la secundaria, entonces¿cómo es posible que prefiriese a ese antes que a ella?

Su orgullo se sintió atacado antes esas palabras.Que ella sería la última mujer que lograría interesarle

-que estupidez... -apretó los dientes mientras aceleraba sus pasos sin darse cuenta quien cruzaba por su camino

Como era de esperarse chocó con una persona, una chica para ser específicos

» ¿quién ha sido la estúpida? «

-Lo lamento mucho, ¿te lastimé? - sujetó delicadamente a la mujer frente a ella mientras fingía preocupación, de manera disimulada analizaba a quien tenía en frente de pies a cabeza, estaba en su salón pero hasta ahora no le había prestado importancia .Estaban en un pasillo grande, no se puede tomar la libertad de gritarle en frente de tantas personas aunque no duda de que haga lo que haga seguirá siendo glorificada por todos inclusive hasta los propios maestros

-e-eh si, lo estoy- habló con nerviosismo la mujer de cabellos cremas al tener a una chica tan linda preocupada por ella-lo lamento, soy algo torpe

» Muy torpe diría yo, ensuciaste mis medias «

Lindas palabras Donde viven las historias. Descúbrelo ahora