HB4.

8 1 0
                                    

Stella Goethia está más que enojada, se nota con cada movimiento de sus plumas, la manera en la que entrecierra los ojos, el fuerte "tap tap" de sus pisadas, evidentemente su aura es más peligrosa e intensa que lo habitual. Todo esto por una razón: Octavia no responde.

Ha intentado de todo, llamadas, mensajes, incluso la fue a buscar al palacio Goethia, está lejos de ser la madre del año, claramente, es justo que cualquiera piense que le importa más la riqueza que su hija, su propio hermano la trata como a un idiota y ¿puede ser? Sí, puede ser, pero en alguna parte de su demoníaca entidad siente...

¿¡A quién mierda engaña!? Necesita a Octavia para no perder su estatus, esa chiquilla tiene a su padre en una estima más alta que la de ella, la frustra, pero es la verdad, escogería al inepto de su marido antes que ella y eso, eso empeora aun más su enojo.

Frente a ella, Andrealphus alza una ceja, evita hacer un giro de ojos porque cuando dijo que su hermana tiene suerte de ser bonita, lo dijo en serio, quien no la conoce se atrevería a tener algo con ella, los que sí, por otro lado...

— Es un buen momento para que visites al padre de tu hija y finjas preocupación, tal vez haya gente estúpida que te crea.

Honestamente, ¿Pueden culparlos? Literalmente son demonios que crecieron en el infierno y todo lo que conocen es de ahí, ¿Cómo es posible pensar que serán el epítome del amor filial? Claro, hay excepciones, pero estás se pueden contar con la palma de la mano, Stolas por ejemplo, no es ningún secreto que lo daría todo por su hija? ¿Por qué es distinto para Stella?

Estas son cosas que Andrealphus cuestiona de manera un tanto superficial, Octavia Goethia es su hija, sí, ¿Siente algo "cercano" por ella? ¿O la ve solo como la heredera, princesa de la casa Goethia? ¿Se le puede culpar por no profundizarlo demasiado, todo por querer sobrevivir en un mundo al que son tirados a su suerte?

Después de unos minutos, algo parece haberse asentado en la mente de su hermana, porque ladea la cabeza en un gesto que luce pensativo.

— Debo encontar a Octavia y juntas visitar al inepto de Stolas.

Andrealphus resiste el impulso de arrojarle una taza de café caliente, porque o carece de vergüenza o rebosa de estupidez.

— Si, porque ella estará encantada de acompañarte, después de todo solo intentaste matar a su padre.

Las mismas medidas de autocontrol no se aplican para Stella quien simplemente le arroja lo que está más cerca de su alcance lo que resulta ser un jarrón el cual logra esquivar por pocos centímetros.

— Stella, por si no te has dado cuenta... No soy Stolas, vuelve a hacer eso y despídete de tus "perfectas garras".

Dicho esto, se levanta y deja a su hermana sola, las hermanas son difíciles sí, pero ninguno tiene a Stella Goethia como hermana. Pensándolo bien, considerando quien es su madre, Octavia es una buena polluela.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jul 27 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Helluva Boss: Stars in hell.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora